Puede que no conozcas una empresa llamada Everrati. Es un especialista británico cuyo objetivo es convertir a propulsión eléctrica todo tipo de coches. Su último proyecto ha sido un Porsche 964, del que incluso han conservado los puntos de apoyo del motor, haciendo su conversión a coche eléctrico totalmente reversible. El próximo proyecto de Everrati es electrificar uno de los iconos de las carreras de coches del siglo XX. El Ford GT40. Y te quiero contar por qué este proyecto no es un sacrilegio, y por qué deberíamos impulsar este tipo de acciones.
Superformance es una empresa estadounidense dedicada a la producción de «Continuation Cars», réplicas muy fieles a los coches originales. Los coches, en este caso son Ford GT40 y Shelby Cobra, en todas sus versiones e iteraciones. Muchos vehículos son extensamente modificados y algunos incluso pueden equipar motores más modernos – hace años crearon un GT40 con motor V6 EcoBoost. Son una empresa de excelente reputación y sus réplicas alcanzan precios estratosféricos, evidenciando la calidad del producto suministrado.
Everrati y Superformance han llegado a un acuerdo para producir un GT40 eléctrico. No hace falta poner el grito en el cielo: a nadie en su sano juicio se le ocurriría usar uno de los poquísimos GT40 originales y transformarlo en un vehículo eléctrico – sería un verdadero crimen. Entre otros motivos porque su valor está cómodamente situado por encima de las siete cifras. Sin embargo, una «réplica» de estética clásica y motor eléctrico es una gran idea, brindando una dimensión nueva a un chasis de espectacular dinámica y diseño apasionante.
Aunque echemos de menos su motor V8, el par motor instantáneo de un motor eléctrico de alta potencia también es una experiencia en sí misma – tendrás, eso sí, que olvidarte de la parte auditiva. Los detalles del proyecto aún no han trascendido, pero se ha hablado de un chasis creado a medida, además de una batería y motor eléctrico diseñados a medida. Como es lógico, prestarán mucha atención a la posición de la batería en el coche, especialmente de cara al reparto de pesos. En cuanto a potencia, no debería haber escasez.
El 911 eléctrico de Everrati presume de hasta 500 CV de potencia y una batería de 57 kWh con la que puede recorrer hasta 257 km. En un GT40, podríamos ver un nivel de potencia superior y una batería algo más ligera. Aunque el coche no gozase de una gran autonomía, su peso será contenido y tendrá una gran respuesta en un circuito o tramo revirado. Por el momento no sabemos cuándo se lanzará el primer Ford GT40 eléctrico, pero si la propia Ford ha llamado Mustang Mach-E a su crossover eléctrico, electrificar una réplica de GT40 parece incluso inocente.
Fuente: Carscoops
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