Tan lejos como la semana pasada, la marca Ford presentó la actualización de la tercera generación del Kuga, un SUV de dimensiones medianas cuya versión PHEV lo convirtió en el coche híbrido enchufable más vendido de España en 2023. Ahora, apenas unos días más tarde, ya conocemos sus tarifas y, para nuestra sorpresa, prácticamente no han subido respecto al modelo de 2020, el cual presentaba una dotación tecnológica inferior, así como un aspecto (diseño) distinto.
El «restyling» del Ford Kuga 2024 en tres claves
Si bien mi amigo Sergio Álvarez ya trató la renovación parcial del Kuga en profundidad, aquí van un resumen de los cambios más relevantes respecto al producto que llevaba a la venta desde hace 4 años. El primero tiene que ver con su apariencia, más moderna, familiarizada con el resto de la gama de Ford en Europa e idéntica a la de su homólogo norteamericano, de nombre Escape. En este sentido destaca un frontal muy diferente al anterior, así como la llegada de una versión Active, con mayores protecciones, más altura libre al suelo y mejor manejo «offroad».
Ford Kuga
Los otros dos puntos tienen que ver con su revisión en términos de equipamiento y de mecánica. Por un lado, se ha rediseñado la consola central, sobre la que se instala una pantalla táctil de 13 pulgadas y lo último en conectividad. Queda complementada por otra, con casi el mismo tamaño, que hace de cuatro de instrumentación digital. Por el otro, ya no hay ninguna opción diésel y sólo se deja una de gasolina sin hibridar con 150 CV. Las otras son una HEV (etiqueta ECO) con 180 CV y una PHEV (0) con 243 CV.
Un D-SUV con acento valenciano y más de 400 l de maletero por poco más de 30.000 €
Con 4,62 m de longitud, un maletero que declara 412 l parece algo escaso, aunque no deje de ser muy práctico y apto para el equipaje de cuatro personas durante un fin de semana. Sin embargo, este es, quizá, el único punto débil de «nuevo» Kuga, pues se trata de un SUV del segmento D que mejora en todo lo demás sin que su precio crezca mucho.
Ford pide por este coche un mínimo de 39.600 euros, que son sólo 1.400 más de lo que costaba antes de su actualización, la cual aporta mucho más al automóvil en cuestión. No obstante, la firma estadounidense lo ofrece desde 32.770 euros si se financia con FCE Bank. Al margen de sus equivalentes chinos (cada vez más), sólo el Mazda CX-5 o el SsangYong Torres son más baratos en su categoría.
Frente a esas dos buenas alternativas, un comprador español podría decantarse por el Kuga por tres motivos: una fabricación nacional, pues se construye en la fábrica que la compañía del óvalo azul posee en Valencia; una versión PHEV con autonomía eléctrica de hasta 69 km a partir de 38.920 euros; y, por último, un acabado de acceso deportivo ST-Line cargado de tecnología y con opción a cambio automático y tracción integral.