Aunque en estos momentos todos ya saben quién es Ken Miles y cuál fue su papel en el desarrollo de los Ford GT40 que ganaron en las 24 Horas de Le Mans de 1966, no muchos aficionados saben que el propio Ken Miles se fogueó en un Ford Mustang Shelby GT350. Fue uno de los pilotos de prueba de su desarrollo, dicho sea de paso. 55 años más tarde, Ford celebra este legado con un paquete muy especial para el actual Ford Mustang Shelby GT350 y GT350R, llamado Heritage Edition Package. Una excelente forma de rendir homenaje a su pasado, y sacar rédito de la película.
La victoria de Ken Miles en el primer GT350 en la Green Valley Raceway de Texas fue solo el primer paso del impresionante legado histórico de este Ford Mustang de altas prestaciones. El GT500 puede haber tenido más renombre, pero en las carreras, el rival más temido era el GT350 – que se lo digan a los Corvette que humilló en pista en las competiciones de la SCCA de California. La decoración de aquellos Ford Mustang es la que inspira el paquete Heritage Edition de los nuevos GT350, imitando tanto su color de base como las franjas azules.
Ford Mustang
Un color blanco de tonos cálidos llamado Wimbledon White, que forma un perfecto contraste con el Guardsman Blue de las franjas longitudinales y las franjas laterales. Los logotipos del coche y también están acabados en el mismo azul de las franjas. En el interior de estos modernos Ford Mustang deportivos encontramos unos emblemas específicos, así como asientos deportivos de color negro, con un ribeteado en contraste rojo. El precio de este paquete opcional es en Estados Unidos de 1.965 dólares, una cifra que nos recuerda el año de estreno del GT350.
Ford tiene mucho que agradecer a Carroll Shelby, que de forma quizá inintencionada, ha convertido al pony car en un icono planetario, y una auténtica vaca lechera a nivel de marketing. Nada más cambia en estos Ford Mustang, que el año pasado recibieron una serie de modificaciones para aumentar su eficacia, con una geometría revisada para el tren delantero, componentes aerodinámicos rediseñados y una puesta a punto diferente para la suspensión Magneride, además de un sistema de dirección asistida con más retroalimentación.
Seguirá sin estar a la venta en Europa, donde nos seguiremos perdiendo su motor 5.2 V8 Voodoo, capaz de girar más allá de las 8.000 rpm, desarrollando 528 CV de potencia.