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El Ford Sierra Cosworth RS500 perfecto está a la venta... y cuesta más que un Porsche 911 a estrenar

El Ford Sierra Cosworth RS500 es posiblemente el Ford Sierra definitivo. Es fundamentalmente una versión de calle del Ford Sierra Cosworth «Evolution» que Ford quería homologar en los campeonatos británico y europeo de turismos. Solo 500 unidades fueron fabricadas, y todas fueron convertidas a especificaciones RS500 por Tickford Engineering entre los años 1987 y 1988. La unidad que Silverstone Auctions pone a subasta es posiblemente una de las mejores en existencia, si no la mejor. El gran pero es su precio de venta estimado: un mínimo de 100.000 libras, más que un Porsche 911 Carrera a estrenar.

¿Qué diferencias había entre el Ford Sierra Cosworth RS500 y otros Sierra RS Cosworth? En primer lugar, era un coche vendido únicamente con carrocería de tres puertas y propulsión trasera – que tradicionalmente ha sido la configuración más valiosa. Todos los Ford Sierra Cosworth RS500 fueron vendidos en Reino Unido, y todos tenían el volante a la derecha. La principal diferencia con otros RS Cosworth era un motor potenciado, y un kit aerodinámico mucho más agresivo. El motor era el legendario Cosworth YB de cuatro cilindros en línea, cuya versión de competición producía de forma fiable más de 300 CV de potencia.

Todos los Ford Sierra RS500 Cosworth iban a ser negros, pero 56 unidades blancas y 52 unidades azules fueron finalmente producidas.

El Sierra Cosworth RS500 no era tan potente, pero desarrollaba en 1987 unos impresionantes 225 CV turboalimentados – los mismos que tendría el icónico Ford Escort RS Cosworth. El Sierra RS500 coche abiertamente enfocado a track-days y conducción dura, y por ello, su motor tenía una culata más resistente, así como un turbocompresor Garrett T04 de mayores dimensiones. También tenía modificaciones en intercooler, así como un sistema de refrigeración mejorado. El sistema de alimentación de combustible había sido reforzado con inyectores de mayor capacidad y un raíl de alimentación prácticamente de carreras.

Ford quería que el coche fuera potenciado por sus futuros clientes, y preparó tanto motor como sistema de refrigeración para ello. La aerodinámica del coche también fue modificada pensando en el futuro uso exigente de los coches, con un paragolpes delantero en el que se eliminaron los antiniebla, que fueron reemplazados por un conducto de refrigeración para los frenos. En la zaga, se añadió un segundo spoiler, complementario al alerón «cola de ballena», ya considerado parte indispensable de los Cosworth. La unidad que sale a subasta es la número 455 de las 500 producidas, y es una auténtica joya.

Con sólo 1.207 kilos de peso, un Sierra RS500 Cosworth era capaz de rozar los 250 km/h y hacer el 0 a 96 km/h en sólamente 6,1 segundos. Hace ya la friolera de 30 años.

Es de color blanco, y actualmente tiene sólamente 9.715 kilómetros en el odómetro. La casa de subastas cree que es una de las unidades con menos kilómetros en existencia, y una de las más originales, ya que muchas fueron preparadas o potenciadas por sus propietarios. La unidad proviene de una colección privada alemana, y desde 2007, ha estado conservada en Reino Unido, en un garaje tanto climatizado, como deshumidificado. En 2014 el coche fue completamente revisado por Tremona Garage – el mayor especialista en estos coches de Reino Unido. El coste de esta revisión superó las 4.000 libras esterlinas.

Silverstone Auctions vendió un RS500 similar, con el doble de kilómetros, por un precio superior a las 115.000 libras estimadas en esta subasta – el límite superior de un precio de venta estimado entre 100.000 y 115.000 libras – por lo que creen que se trata de una «ganga». Como instrumento de inversión posiblemente sea una compra lógica, pero personalmente, vería un pecado tener un coche como este siempre encerrado en un garaje.

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Sergio Álvarez

Aunque es técnico en comercio internacional de formación, los coches han sido su pasión (incluso obsesión) desde que apenas levantaba un metro del suelo y sus padres le regalaron un Ferrari rojo a pedales. Su afición se ha profesionalizado en Diariomotor, donde está presente desde 2008. Seguir leyendo...

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