Aunque las apuestas de la Unión Europea por el coche eléctrico son firmes y tajantes, la crisis que azota al mundo hace que algunos países empiecen a recular en ciertos aspectos. Y es que después de ver cómo ciertos estados de Estados Unidos regulaban el horario de carga de los coches eléctricos debido al calor y precio de la luz, ahora nos encontramos con una situación muy semejante en Europa con Francia buscando poner horarios para cargar a los vehículos eléctricos y con muy posiblemente a una España emulando la jugada.
Y es que así lo solicitaban los propios modelos de Tesla a sus usuarios dado el calor extremo que se ha registrado este verano en prácticamente todo el mundo, buscando que se diese prioridad a sistemas ideados para apaciguar las altas temperaturas y no cargar el coche eléctrico. Ahora, y pese a que los grados están cesando, con la crisis energética igualmente en pleno auge Francia busca limitar el abastecimiento de los eléctricos en pro de reducir el consumo de energía global del país entre un 1 y un 5%, pudiendo llegar a un 15% en el escenario más alarmista.
Francia quiere reducir a toda costa el consumo energético, y ello pasaría por regular los horarios de carga del coche eléctrico
Así lo comunicaba El Confidencial después de que Élisabeth Borne, la primera ministra francesa, presentase el plan de acción provisional de la red eléctrica francesa de cara al próximo invierno. En este se establece la necesidad de reducir el consumo energético del país entre ese ya mencionado 1 y 5%, especialmente por el duro escenario que podría darse en las horas de máxima demanda.
Estas son, concretamente, entre las 8 y 13 horas y por la tarde entre las 18 y 20 horas, sin contar fines de semana y días festivos. De esta manera, sería durante estos horarios cuando se prohibiría la carga del coche eléctrico salvo en situaciones de emergencia y extrema necesidad, aunque no sería una regulación que existiera de manera permanente.
Y es que esta dependería del EcoWatt, un sistema disponible en Francia desde el año 2020 y que mide en tiempo real el nivel de electricidad para nutrir al país. Concretamente, este realiza avisos tanto a particulares como empresas sobre el estado energético en base a tres colores: azul, verde y rojo. En el caso del primero, solo se deberían aplicar las conductas de ahorro energético de manera genérica; si es verde, se recomienda al usuario que haga uso de la energía en el mejor horario posible; pero si es rojo, el consumo energético debe reducirse de manera tajante.
Sería en este último escenario cuando entrarían en acción las regulaciones propuestas por la primera ministra francesa, incluyendo los horarios para cargar el coche eléctrico. ¿Llegaremos a ver una medida similar en España? Es pronto para decirlo, pero teniendo en cuenta las medidas que se pueden tomar en Inglaterra y ahora en Francia, todo apunta a que mientras la crisis energética persista el resto de Europa seguirá un camino similar tarde o temprano.