Mitsubishi ha pasado por un importante proceso de reconversión en los últimos años, culminado con la alianza con Renault-Nissan rubricada en 2016. En la última década hemos visto un cambio en su estrategia a nivel global, cuyos resultados estamos viendo en los últimos meses. Echando un vistazo rápido a su gama de productos globales, solo nos encontramos SUVs y el polivalente Mitsubishi Space Star.
Hace tan solo 10 años, los principales estandartes de la firma japonesa eran el Mitsubishi Montero y el Mitsubishi Lancer, particularmente su versión Evolution. A dia de hoy, el Lancer ya no existe y el Mitsubishi Montero lleva en el mercado desde 2006 sin apenas cambios, y con un futuro muy incierto. En cambio, hemos visto una clara apuesta por el Mitsubishi Outlander, quizá el modelo tradicional de catálogo de Mitsubishi que más se adapta a los gustos actuales, y por el Mitsubishi ASX, uno de los pioneros entre los SUV de tamaño medio.
La pujanza de los SUVs a nivel global ha hecho que muchos fabricantes reorienten su estrategia hacia este tipo de vehículos, y en el caso de Mitsubishi es evidente que la apuesta es total. En una entrevista de Car Throttle al director de Mitsubishi para Reino Unido, este ha confirmado el escaso interés de Mitsubishi por otros segmentos, y la respuesta tiene toda la lógica empresarial del mundo.
Su compañía vende poco más de un millón de vehículos al año, y no les resulta rentable desarrollar productos tan opuestos entre sí; no tiene nada que ver el desarrollo de un Mitsubishi Lancer Evolution con el de un Mitsubishi Eclipse Cross, por ejemplo, y los volúmenes de ventas no son los suficientes como para justicar elevadas inversiones en I+D. Asi pues, los SUVs y la tecnología hibrida o eléctrica son los únicos frentes abiertos de Mitsubishi actualmente.
Ello no quiere decir que la marca no vuelva a apostar por otros segmentos en un futuro a medio plazo, pero lo que el cliente demanda y lo que la firma está dispuesta a desarrollar son SUVs. Los avances en tecnología hibrida podrían permitir volver a ver deportivos o berlinas de altas prestaciones en algun momento, pero ahora mismo parece altamente improbable volver a ver vehículos como el Mitsubishi Lancer Evolution o el Mitsubishi 3000GT en los catálogos de la marca.
Tanto el Outlander como el ASX ya son modelos veteranos en el mercado, por lo que en poco tiempo deberíamos ver sus nuevas generaciones, que deberían venir acompañadas por nuevas variantes hibridas e incluso eléctricas. El prototipo Mitsubishi Engelberg es el que marca el estilo que seguirá la marca a partir de ahora.
Fuente: Car Throttle
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