El monstruoso motor W16 desarrollado y fabricado en exclusiva por Bugatti para los Bugatti Veyron y Bugatti Chiron tiene los días contados. Los peculiares motores en W del Grupo Volkswagen se han convertido en todo un referente, pero tarde o temprano tendrán que ceder ante el auge de los motores eléctricos. Bugatti no puede, ni quiere, escapar de esta revolución, motivo por el que ha confirmado que el actual W16 seguirá ganando potencia y alguna que otra revisión en los próximos años, sin embargo el propulsor W16 no conocerá una nueva generación dado que el sucesor del Bugatti Chiron será híbrido si no 100% eléctrico.
El motor W16 nació como una oda al exceso y poderío tecnológico del Grupo Volkswagen al desarrollar el Bugatti Veyron con sus 1.001 CV de potencia. Se trataba de un motor exagerado, costoso, complejo y sin rival en casi todos los aspectos. El relanzamiento de Bugatti necesitaba marcar las diferencias con el resto de fabricantes y su enorme 8 litros de 16 cilindros era un punto sumamente importante de ese plan.
Con el paso del tiempo Bugatti demostró que el W16, cuyo diseño partió de los bloques W12 y W8 del grupo, gozaba de suficiente margen de mejora para seguir siendo un referente en el mercado. Esto se tradujo en una primera evolución hacia los 1.200 CV sobre la montura del Veyron y una segunda evolución más profunda alcanzando los 1.500 CV en el caso del Chiron. Pero tras descubrir al Bugatti Chiron Sport y al Bugatti Divo y las nulas mejoras sobre su motor, todo parecía indicar que habíamos llegado al límite del W16 al no encontrar mejores prestaciones o el muchas veces rumoreado sistema híbrido que permitiera volar al 16 cilindros hacia los 2.000 CV.
Confirmado. El W16 aún tiene por descubrir una versión de más de 1.500 CV de potencia. Así lo ha comunicado el CEO de Bugatti Stephan Winkelmann en una reciente entrevista concedida a Car Advice en la que adelantaba la llegada de una futura revisión del propulsor para mejorar sus cifras, pero en la que también confirmaba que su límite de evolución está próximo ante el auge y mejora que están consiguiendo los sistemas de propulsión eléctrica.
Pero no nos confundamos, por el momento Bugatti sigue descartando cualquier posiblidad de hibridación o completa electrificación de sus modelos ante la falta de rendimiento de éstos en comparación con el W16. Sin embargo en Bugatti también señalan que cada vez se consiguen más y mejores avances, especialmente en reducción de peso de las baterías, hecho que pone fecha de caducidad al W16 para el sucesor del Bugatti Chiron ya sea estrenando una mecánica híbrida o 100% eléctrica.
