¿Os acordáis del TVR Griffith? Se presentó a finales de 2017, hace ya más de seis años, y prometía ser el renacer de la histórica marca británica TVR, que llevaba años desaparecida tras su última quiebra. El proyecto de TVR parecía solvente, y el prototipo presentado, muy prometedor: montaba un 5.0 V8 de origen Ford con 500 CV, tenía un diseño espectacular, y prometía unas prestaciones de órdago. Incluso se pudo conducir virtualmente en el Forza Horizon 4. Sin embargo, TVR vuelve a asomarse al abismo: el futuro del fabricante de deportivos podría estar en serio peligro.
O al menos, eso se desprende de las últimas noticias que llegan desde Reino Unido. Concretamente desde la localidad galesa de Blaenau Gwent, donde TVR había logrado el derecho exclusivo a alquilar unas instalaciones industriales en las que establecer su futura fábrica. La fábrica pertenecía a una empresa llamada Techboard y fue adquirida por el gobierno galés en 2017, que pretendía, a su vez, alquilarla a TVR tras una modernización. En este momento, conviene recordar que Gales cuenta con un 3% de participación en las acciones de TVR.
Sin embargo, el comité industrial del gobierno municipal de Blaenau Gwent descubría recientemente que el gobierno de Gales había anunciado que las instalaciones industriales estaban disponibles para alquilar. El gobierno de Gales confirmaba después que TVR había perdido el derecho exclusivo a alquilar estas instalaciones industriales. De hecho, su tamaño y sus características, poco habituales en el sureste de Gales, han levantado mucho interés y todo apunta a que tendrán un nuevo arrendatario próximamente.
Por su parte, TVR comunicaba a Autocar que dar la espalda a estas instalaciones no es un capricho, corresponde a la cancelación del proyecto de construir un circuito en sus inmediaciones – el Circuit of Wales. TVR quiere que su fábrica cuente con un circuito cercano, con el objetivo no solo de probar sus desarrollos, si no de atraer clientela y construir un relato comercial con la épica del motorsport como telón de fondo. No obstante, el proyecto de TVR parece tener en estos momentos un ritmo demasiado pausado.
Han pasado seis años desde la presentación del Griffith, que no ha comenzado a producirse en serie, y los últimos anuncios oficiales de la marca dirigida por Les Edgar tuvieron lugar hace año y medio, cuando anunciaron sus planes de producir un SUV y una berlina eléctricos, tras la inversión en la empresa de Ensorcia Automotive. En el último desarrollo recogido por Autocar, TVR anuncia que sus futuras instalaciones productivas estarán situadas junto al histórico circuito de Thruxton, al suroeste de Londres.
La empresa cree que encontrará fuerza productiva entrenada y dispuesta, además de tener un circuito de pruebas en su trastienda. No obstante, no ha comunicado cuando construirá su fábrica, a cuanta gente empleará, o cuando comenzará a producir sus vehículos. Este tipo de proyectos no se materializan de la noche a la mañana, y el tiempo juega en contra de TVR, un pequeño pez en un mercado de tiburones dedicados a la venta de deportivos y superdeportivos.
Fotos del TVR Griffith