General Motors afirmó el pasado miércoles 4 de septiembre que va a producir vehículos híbridos que funcionen tanto con gasolina como con etanol en Brasil, aprovechando la gran industria de etanol en este país. De esta manera, adopta un planteamiento muy similar al que han tenido otros fabricantes en el mercado del país de Sudamérica como Honda o Stellantis (Reuters).
Vehículos híbridos propulsados por gasolina y etanol
La gran particularidad que tiene Brasil, por no decir también la gran característica de interés para el medioambiente, es precisamente la gran industria de etanol, pudiendo fabricar biofuel fabricado a raíz de la fermentación del azúcar del maíz o de caña de azúcar. En el caso de GM, ha asegurado en un comunicado que fabricará dos modelos con esta mecánica en sus fábricas situadas en el estado de Sao Paulo.
Otra de las cuestiones es la fecha en la que llegarían estos modelos. GM no ha concretado ni prometido ninguna fecha, si bien un sindicato de la fábrica de Sao Jose dos Campos indica que el primero de estos dos modelos híbridos que funcionen con gasolina y etanol llegaría al mercado ya en el próximo 2025. Esto es parte de un acuerdo por valor de 1.118 millones de euros firmado en enero, de los cuales unos 878 millones se destinarían a sus dos fábricas en Sao Paulo.
Ahora bien, esto no significa que GM se haya olvidado del vehículo eléctrico en Brasil o el resto de Sudamérica, todo lo contrario: GM sigue firme en que los eléctricos sean el objetivo de su hoja de ruta. Sucede que los híbridos ya no se consideran un simple puente entre la combustión y la electrificación, sino que están creciendo de manera notable – no hay más que ver las matriculaciones en España, comiendo terreno al resto de motorizaciones, especialmente los diésel, y acercándose cada vez más a las cifras de los motores de gasolina convencionales.
Por un lado, el uso de etanol como combustible al igual que aquí vemos vehículos que funcionan con gasolina y GLP queda algo lejos en Europa, siendo un mercado muy distinto el de una Sudamérica donde GM es una gran fuerza. Ahora bien, este desarrollo en biofuels y combustibles alternativos si es de gran interés para una industria que busca también reducir al máximo las emisiones de CO2 en los motores de combustión. GM estudia además crear un modelo híbrido enchufable que utilice también este tipo de combustibles, combinando gasolina, etanol y electricidad.
