La Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas (Aesae) insta a los nuevos gobiernos municipales a que evadan los obstáculos artificiales que están impidiendo o retrasando la implementación de nuevas gasolineras automáticas. Además, pide que se proteja la libre competencia en un sector en el que predomina el oligopolio.
Aunque el crecimiento de las estaciones de servicio automáticas es beneficioso, muchas empresas del sector se ven afectadas por las trabas municipales a la apertura de nuevas estaciones de este tipo en algunas localidades de nuestro país. Estos obstáculos la mayoría de las veces son originados por la burocracia o por causas injustificadas, lo que provoca retrasos en la apertura y un aumento de los precios para los consumidores.
Las restricciones municipales pretenden prohibir la instalación de nuevas gasolineras a cierta distancia de los edificios, algo que no se exige a las gasolineras tradicionales y no forma parte de la normativa nacional de seguridad. Esta restricción obliga a situar las estaciones automáticas en las afueras de los centros urbanos, donde hay menos tráfico.
¿Cuáles son las ventajas de tener gasolineras automáticas en zonas urbanas?
La ventaja más obvia es la comodidad que supone para los conductores que viven o trabajan en la zona y necesitan repostar sus vehículos de forma rápida y sencilla. Además, también es importante resaltar la reducción de distancia para los conductores, ya que si están en una zona lejana de su domicilio tendrían que desplazarse a una larga distancia para encontrar una gasolinera automática.
Es importante también fomentar la competencia en el mercado local, ya que al incentivarla los mayores beneficiados son los usuarios al haber una reducción en los precios debido a la oferta y demanda. Y por último, por poner un ejemplo, al haber más estaciones de servicio los conductores pueden adquirir otros productos en negocios cercanos mientras sus vehículos son repostados.
Las gasolineras automáticas están equipadas con sistemas de circuito cerrado, extintores automáticos y cumplen la normativa nacional, además de ofrecer atención remota personalizada durante las horas de funcionamiento. También cabe señalar que los depósitos utilizados para el almacenamiento de combustible son de doble pared para evitar fugas e incidentes.
La Aesae también hace hincapié en la necesidad de aumentar los controles en las gasolineras más antiguas, ya que el paso del tiempo puede deteriorar los materiales y los sistemas de seguridad. El poder judicial ha sido fundamental para proteger la libre competencia en el sector y ha fallado a favor de la instalación de gasolineras automáticas en zonas donde antes estaban prohibidas.
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