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Este GR Yaris con 751 CV se ríe de Koenigsegg y de su “insuperable” motor tricilíndrico

Australia es el país de los canguros y del surf, pero también de los preparadores de coches más delirantes. Este es el caso de Powertune, una empresa especialista en aumentar el rendimiento de distintos automóviles “de calle” hasta niveles bestiales. Y es que, a pesar de ser radicales, sus creaciones son aptas para circular en vías públicas, un hecho impensable en España. Aquí cualquier mínima reforma puede suponer multa.

La última obra de esta compañía, con reconocimiento internacional, es un Toyota GR Yaris que entrega la friolera de 751 CV con base en un propulsor de tres cilindros que incorpora varias piezas de origen. Por ejemplo, se han conservado sus pistones y bielas de serie, así como su culata y su cigüeñal, lo cual habla muy bien del fabricante japonés y el motor turbo de gasolina con 1,6 litros que presentó en 2020 (sí, hace ya tres años).

Gr Yaris Powertune 2

El motor de 3 cilindros más potente del mundo ya no es sueco, pero ¿cuán fiable será?

Antes de recibir un conjunto de profundas modificaciones que incluyen un intercooler, un turbocompresor y una línea de escape de altas prestaciones, además de nuevas válvulas e inyectores o una gestión electrónica completamente distinta, este GR Yaris desarrollaba una potencia máxima de 261 CV. Es decir, ahora sus “capacidades” se han multiplicado prácticamente por tres o, lo que es lo mismo, han aumentado en casi 500 CV. Para soportar tanta fuerza (desconocemos su par), la transmisión también se ha cambiado en su totalidad, instalando una secuencial con embrague ultrarresistente.

Powertune logra un hito con esta salvajada al conseguir el propulsor tricilíndrico, sin asistencia eléctrica, más poderoso del planeta, récord que hasta el momento ostentaba Koenigsegg con su TFG de 600 CV, equipado en su modelo hiperdeportivo Gemera (que, en realidad, es un vehículo híbrido). Lo hace, adicionalmente, con 400 cc menos de cubicaje y sin recurrir a técnicas complejas como las que emplea esta marca nórdica: válvulas neumáticas gestionadas de forma independiente, doble sobrealimentación, relación de compresión variable o aleaciones superligeras (el bloque sólo pesa 70 kg).

Lo de este Toyota, nacido en Nueva Gales del Sur, es menos refinado o más bruto. Lleva componentes “pata negra” de firmas como Garrett, MoTec, Bosch o X-Shift, pero esto no implica una mayor fiabilidad si una gran cantidad de piezas esenciales no se han reforzado, dimensionado o adecuado a las nuevas especificaciones del motor, cuya potencia por litro es absurda: 470 CV/l. Los australianos aseguran que la unidad en cuestión se ha sometido con éxito a más de 30 pruebas sobre rodillos sin detectarse averías o errores relacionados con la seguridad de funcionamiento del propulsor.

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Javier Montoro

Nació en Valencia, España, en 1994. Antes siquiera de empezar a andar, ya mostraba mucho interés por las cuatro ruedas, algo en lo que, sin duda, le influyó su abuelo, gran entendido y apasionado de esta estupenda cultura. Le regaló un Arias-Paz con 10 años. Seguir leyendo...

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