Los «kei cars» japoneses son vehículos muy peculiares. Están limitados a 3,4 metros de longitud y 64 CV de potencia, gozando de ciertas ventajas fiscales. Son una curiosidad única al mercado japonés, y como existen desde hace décadas, occidente ha desarrollado una tremenda fascinación por ellos. Hay kei cars tan maravillosos como los Autozam AZ-1 o los Suzuki Capuccino, pero estoy seguro de que no sabías que existía un Honda Acty con tracción 6×6 y carrocería pick-up. El todoterreno 6×6 más amable y encantador en toda la faz de la tierra.
Cuando hablamos de vehículos 6×6 normalmente hablamos de bestiales transformaciones todoterreno sobre coches tan dispares como una RAM 1500 TRX, una Ford F-150 Raptor o un Mercedes Clase G. Sin embargo, aquí el protagonista es un adorable Honda Acty. El Acty no deja de ser un sencillo «kei truck», un pequeño vehículo industrial. Una sencillísima camioneta, que en el caso de la unidad de la que os hablamos hoy, pertenece a su segunda generación. Es del año 1994, y su nombre completo es Honda Acty Crawler 6×6.
Honda ofrecía de forma oficial la posibilidad de equipar un Acty con un sistema de seis ruedas motrices. Sus clientes potenciales eran empresas o particulares que necesitaban un vehículo para moverse sobre la nieve – muy abundante en la isla de Hokkaido en invierno. Nadie sabe la cifra exacta de unidades vendidas. Según Carscoops algunas fuentes hablan de 120 unidades, y otras hablan incluso de 20 unidades para el mercado civil. Sea como fuere, es un vehículo muy escaso, muy raro y muy exclusivo. Ahora bien, en verdad, no es un vehículo 6×6, es un 4×6.
El segundo eje trasero no está accionado directamente por el motor, si no por las orugas de goma que la pick-up montaba. Para ello, se requería el montaje de un neumático macizo en los dos ejes traseros. El sistema de tracción total era denominado Real Time 4WD y tiene un funcionamiento similar a un Haldex moderno. Funciona como un vehículo de dos ruedas motrices hasta que se detectan pérdidas de adherencia, y un acoplamiento viscoso envía potencia a un eje adicional. En el caso del Acty Crawler 6×6, está apoyado en un diferencial autoblocante.
A nivel mecánico, los Acty Crawler no se diferenciaban de otros Acty. Es decir, montaban un sencillo motor de 656 centímetros cúbicos capaz de desarrollar 38 CV de potencia y 54 Nm de par motor. Su cambio manual de cinco relaciones tenía relaciones muy cortas para compensar esta falta de potencia – que el velocímetro solo llegue a 120 km/h debería hacernos ver que sus prestaciones son muy discretas. Su cabina es biplaza y aunque es sencilla a más no poder, tiene ese encanto tan característico de los espartanos Honda de los años noventa.
A la venta por parte de un especialista norteamericano en coches japoneses, este Honda Acty Crawler 6×6 tiene un precio de 26.500 dólares al otro lado del charco. Puede parecer caro, pero tiene solamente 106.000 km y es una absoluta rareza. El vehículo está al día de mantenimiento, está en un estado estético casi perfecto y tiene muchos elementos de desgaste recién cambiados.
Fotos del Honda Acty Crawler 6×6
