Pensar hoy en día en un coche práctico es pensar en un SUV, especialmente después de la casi erradicación de los monovolúmenes. Sin embargo, no todo está perdido para quienes requieran de un vehículo versátil, no quieran gastarse mucho dinero y quieran, sobre todo, huir del citado y masificado segmento de los SUV. Y que así sea lo consiguen coches como el Honda FR-V, un monovolumen compacto que puede ser considerado el homólogo japonés del Fiat Multipla con su diseño poco agraciado pero seis plazas reales y con una practicidad sin parangón.
Lo mejor de todo es que todo ello hace que muchos rehuyan del monovolumen nipón, dejando unos precios en el mercado de ocasión bastante interesantes. Concretamente, podemos hacernos con el Honda FR-V afrontando un desembolso comprendido entre, aproximadamente, los 3.000 y 7.500 euros, cifra que varía según acabado, años o kilometraje.
El Honda FR-V es el Multipla japonés, y quiere ser una excelente compra de segunda mano
Estamos hablando de un coche que estuvo en producción durante cinco años, concretamente entre los años 2004 y 2009, lo que podría derivar en unidades con muchos kilómetros. Y aunque bien es cierto que podemos encontrar varios FR-V superando los 300.000 kilómetros -buen síntoma en términos de fiabilidad-, existen otras cuantos con poco más de 100.000.
Además, y como punto positivo de cara a no sufrir demasiados quebraderos de cabeza durante los próximos años, el FR-V obtiene la etiqueta C según la motorización que equipe. Y es que la firma japonesa ofreció un elenco de motores conformado por tres propulsores gasolina y uno diésel, siendo los tres primeros los premiados con dicho distintivo de la DGT.
Concretamente, las primeras unidades del monovolumen japonés se vendían con dos cuatro cilindros atmosféricos gasolina: uno de acceso de 1.7 litros y 125 CV y otro de 2.0 litros y 150 CV. Más adelante, con la llegada del restyling, estos fueron sustituidos por un propulsor de 1.8 litros que desarrollaba 140 CV, mientras que el diésel, un 2.2 turbo de cuatro cilindros que producía también 140 CV, se mantuvo inalterado durante la vida comercial del FR-V.
Lógicamente el Multipla japonés no es, ni mucho menos, el más rápido, pero tampoco lo pretende. Pero lo que sí que pretende es ser un coche sumamente práctico declarando medidas propias de un compacto. Así, el FR-V mide 4,28 metros de largo, 1,81 de ancho y 1,61 de alto, cifras que hacen de este un coche comedido para abordar el mundo urbano y ofrecer, a la vez, un espacio interior gigantesco y, por desgracia, un diseño no especialmente bonito.
¿Por qué es tan práctico el Honda FR-V?
Y es que si lo que queremos es un coche duradero y versátil sin tener que recurrir a un SUV de la mano del FR-V, debemos renunciar al apartado de la estética. Gracias a su diseño, que sí, mejora al del Multipla, pero igualmente era poco atractivo, consigue ofrecer unas puertas muy altas que facilitan inmensamente la entrada y salida del habitáculo, siendo ideal para personas mayores o para sacar o meter niños.
Además, su anchura provoca la presencia de un cristal enorme tanto delante como detrás, dotando al FR-V con una visibilidad estupenda. A ello hay que sumarle la presencia de una sexta plaza colocada, concretamente, entre el asiento del piloto y del copiloto. Esta es viable gracias a la ausencia de una consola central, de la inserción del freno de mano en el propio salpicadero a modo de palanca y a, una vez más, su anchura.
Esta cuenta con las mismas dimensiones que los asientos colindantes, permitiendo a un tercer pasajero viajar cómodamente en el medio, además de que se puede desplazar longitudinalmente. Pero en caso de no existir la necesidad de ocuparla, esta puede plegarse hacia delante y convertirse en un reposabrazos con cuatro apoyavasos de la mano cajón debajo de la propia butaca e incluso un hueco escondido en la zona del asiento.
Las plazas traseras gozan de una gran anchura, espacio para las piernas y para la cabeza, así como anclajes ISOFIX. Además, la plaza central trasera se puede mover hacia delante y hacia atrás, ganando así más espacio para el maletero o para las piernas según necesidades.
Y ya hablando del maletero nos encontramos con un espacio de carga de 439 litros, no una cifra espectacular pero que está compensada por unas formas regulares y por la cantidad de espacio que hay en el resto del habitáculo. Y por si no fuera suficiente, la bandeja está dividida en tres secciones para poder mover a placer el asiento central o incluso plegarlo, peculiaridad presente en el resto de plazas que permiten al Honda FR-V ofrecer hasta 32 configuraciones diferentes de asientos.
Sea como fuere, si necesitamos un coche práctico, fiable y relativamente moderno, el FR-V puede ser un gran candidato, especialmente si somos capaces de obviar un diseño no desagradable pero tampoco especialmente bonito.
