El ex líder de la Alianza Renault–Nissan–Mitsubishi Carlos Ghosn continúa a día de hoy en el Líbano (donde cursó sus estudios elementales) tras su detención y procesamiento años atrás por presunto fraude fiscal. Ahora bien, sigue atento a las noticias del motor y considera que la casi hecha alianza entre Honda y Nissan, a la que se sumaría Mitsubishi, puede ser una manera encubierta a través de la cual Honda tome el control de las otras dos marcas en cierto sentido aprovechando su gran fortaleza en la actualidad.
La futura asociación entre Honda, Nissan y Mitsubishi
Honda es el segundo fabricante en Japón y sus ventas han aumentado en el último ejercicio fiscal completo, logrando un incremento de ventas del 11% hasta los 4,1 millones de vehículos vendidos. Por el contrario, los resultados de Nissan a nivel global no han sido tan positivos, lastrado por la situación en Estados Unidos – aún así registró un aumento del 4,1%, situándose a nivel global en 3,4 millones de vehículos vendidos (Automotive News Europe).
Es por ello que Ghosn considera que Honda podría realizar una adquisición tanto de Nissan o de Mitsubishi (teniendo esta un volumen de ventas menor que las otras dos) aprovechando esta situación. También recuerda, por su propia experiencia, que el hecho de formar una alianza en sí entre varias marcas es lo fácil, pero lo complicado es hacerla funcionar correctamente.
«Firmar una alianza es la parte fácil. Ahora bien, hacer que funcione es algo completamente distinto. No puedo imaginar cómo puede funcionar entre Honda y Nissan salvo que tomen el control por parte de Honda de Nissan y Mitsubishi con Honda al volante. Van a tomar el control de manera camuflada«, aseguró Ghosn. Ghosn y su brutal capacidad de trabajo fue la que logró revertir la situación económica de Nissan a finales de los noventa, levantando la alianza con Renault a la que Mitsubishi se uniría en 2016, pero nunca consideraron aliarse con Honda, quienes siempre han funcionado de manera independiente salvo sinergias con General Motors en el pasado.
Un aspecto importante de esta historia, y que en cierta medida podría concordar con la predicción de Ghosn, es el hecho de que Nissan, Honda y Mitsubishi no están pensando en crear una joint-venture con capital compartido entre todas las partes. Es una opción muy requerida en la actualidad (caso de Horse con Renault y Geely) y se parece bastante a la de Toyota, Subaru y Mazda, siendo Toyota accionista de las otras dos. Ahora bien, la opción de fundar una nueva compañía como fruto de esa alianza está en la mesa.
«Trabajar en sinergias, aumentar ganancias y recortar costes»
«Decir que trabajarán juntos es el 5% del reto. El otro 95% es donde hay que sentarse, tener una posición fuerte y tener un reparto del trabajo. Hay que trabajar en sinergias, asegurarse de que no está obcecado en identidad o sentimiento nacional. Hay que estar siempre atentos a aumentar las ganancias, a recortar costes«, añadió Ghosn. En la actualidad, Ghosn ha dejado atrás su antigua vida y, con 70 años, se dedica a una vida tranquila en el Líbano (cuya ley hace que no extraditen ciudadanos) mientras sus abogados lidian con la situación del pasado con Nissan.
