El Honda S2000 es uno de los coches más icónicos de los últimos 20 años. Posiblemente el roadster de tracción trasera definitivo: desarrollado como descapotable, ligero, muy deportivo y con un motor 2.0 VTEC atmosférico capaz de desarrollar 240 CV y girar a 9.000 rpm. Es lógico que sus precios en el mercado de segunda mano estén absolutamente disparados. Honda es muy consciente de la reputación de oro que tiene su roadster, y con motivo de su 20 aniversario han decidido lanzar al mercado una serie de accesorios oficiales para darle un toque más actual.
Estos accesorios se llaman «20th Anniversary Pack» – a originalidad no les ganan – y en principio se comercializarán solamente en Japón. Modulo será el fabricante y suministrador de estos elementos – pensad en una especie de NISMO, Gazoo Racing o Ralliart, pero sin un foco tan intenso en las modificaciones mecánicas e igualmente oficial. El 26 de junio este catálogo de modificaciones se pondrá a la venta y el 19 de enero de 2021 se cerrarán los pedidos. Todo apunta a que serán modificaciones populares, y de amplio valor futuro garantizado.
Una de las modificaciones más interesantes es una nueva suspensión deportiva, con cinco posiciones de dureza regulable en el tren delantero. Aunque solo costará 170.500 yenes (1.424 euros), Honda solo fabricará 500 juegos, que posiblemente se agotarán en cuestión de días. A nivel estético, la modificación más importante es un nuevo paragolpes delantero. Por un precio de 96.800 yenes (808 euros) tendremos un frontal más agresivo y ligeramente ensanchado. Personalmente prefiero el aspecto de serie del coche, pero es cuestión de gustos, como todo en la vida.
Un pequeño spoiler trasero puede ser nuestro por 46.200 yenes (386 euros), mientras que un pequeño aditamento a la talonera nos costará 33.000 yenes (275 euros). En cuanto al interior del coche, tendremos disponibles unas nuevas alfombrillas con el emblema del 20 aniversario (en color negro o rojo) así como una nueva tapa para el sistema de sonido, situado en la consola central. Estas tapas están limitadas a 2.000 unidades, dicho sea de paso. La guinda la pone una iluminación LED de color blanco para la parte inferior del salpicadero, para nuestros pies.
En definitiva, modificaciones sencillas, completamente reversibles, que en un futuro podrían perfectamente convertirse en piezas de colección.
Fuente: Carscoops