Existen todo tipo de youtubers que ofrecen vídeos de los más variopintos, pero si tenemos que destacar a uno en el sector automovilístico es, sin lugar a dudas, Hoovie de Hoovie´s Garage. Estamos hablando de uno de los más influyentes youtubers de coches en Estados Unidos con un canal que registra 1,41 millones de suscriptores pero, ¿dónde reside el encanto de alguien que afirma que tiene la colección de coches más estúpida del mundo? Vamos a descubrirlo.
Y aunque bien es cierto que desde el vídeo que hoy nos ocupa a la actualidad han cambiado algunos coches en el garaje de Hoovie, la esencia sigue siendo la misma. Porque aunque bien es cierto que él mismo afirma que el valor total de todos sus coches cuando eran nuevos es de 2,2 millones de dólares, el gasto que ha realizado nuestro protagonista para tener todos dista mucho de esa cifra.
Este es Hoovie y, según él mismo, tiene la colección de coches más estúpida del mundo
El arte de Hoovie y su encanto residen, además de un su carisma y forma de presentar sus vídeos, en cómo adquiere sus coches. Y es que él siempre busca la unidad más barata en el país de ese modelo, asumiendo que tenga infinidad de problemas -como siempre suele ser- e incluso algún golpe, teniendo que invertir luego tiempo y dinero en arreglarlos y buscando que, aún así, no supere nunca el gasto de adquirir el mismo coche pero sin ningún problema.
Así, nos encontramos con coches tan variopintos como un Lamborghini Murciélago Roadster, un Porsche 550 Spyder réplica con swap a motor bóxer de origen Subaru, un Ferrari 458 Spyder que le está dando muchos quebraderos de cabeza, un Chevrolet SSR y, recientemente, un Bentley Bentayga para su mujer.
Todos ellos tienen siempre algo en común, ser los más baratos del país y, de vez en cuando, tiene suerte con ellos. Por ejemplo con el Bentley Bentayga que adquirió recientemente, el cual, pese a ser el más barato de todo el país, cuenta con el motor W12 y está en perfectas condiciones, pero la brutal depreciación que experimenta el SUV inglés ha permitido a Hoovie llevárselo a casa por un muy buen precio.
También nos encontramos con coches tan especiales como un Lamborghini Countach o un Diablo VT Roadster. Otros integrantes espectaculares de la colección de son un Mercedes-Benz SLS o un Shelby GT500 de última hornada. Seguramente para muchos -entre los que me incluyo- no es una colección estúpida, pero Hoovie busca transmitir su pasión por los coches con humor y, sobre todo, riéndose de él mismo.
Y es que al fin de cuentas el propio Hoovie afirma que en ocasiones no le resulta lógico gastar poco en adquirir un coche y después superar con creces lo que cuesta uno en buen estado debido a las reparaciones. Pero es que ahí radica el encanto de su canal y de lo que hace, que de no resultarle rentable a fin de mes estoy seguro que dejaría de lado esta forma tan peculiar de comprar y vender coches.