Tal y como estaba previsto, la nueva generación del SUV compacto más exitoso de Hyundai, el Tucson, estrena una mecánica híbrida enchufable de 265 CV con etiqueta CERO de la DGT que llegará en primavera, la misma del Kia Sorento, pero en un envoltorio más compacto, y con un precio que se desconoce por el momento – oferta gama Hyundai Tucson -.
El Hyundai Tucson plug-in, que es como se llamará, se posiciona como la versión tope de gama con esta mecánica PHEV que desarrolla una potencia total combinada de 265 CV y 350 Nm de par. Para ello recurre a un 1.6 T-GDi, un gasolina con turbocompresor y distribución variable de 180 CV, y a un motor eléctrico de 66,9 kW (91 CV) que se alimenta de una batería de polímero de litio de 13,8 kW de capacidad (bruta). Con ella se espera que homologue en el ciclo WLTP una autonomía en modo puramente eléctrico de unos 50 km, lo que le haría portador de la codiciada etiqueta CERO de la DGT, contando con un cargador de a bordo de 7,2 kW de potencia para su recarga. El peaje de este sistema se traduce en un disminución de la capacidad de maletero de 58 litros en comparación con la versión híbrida convencional, pero que aún mantiene unos excelentes 558 litros, además del consiguiente sobrepeso.
Hyundai Tucson
Respecto al sistema de transmisión, destaca el cambio automático de doble embrague al que se asocia, cuyo principal inconveniente sobre el papel es el hecho de contar con sólo seis relaciones, mientras que otros fabricantes, como el Grupo Volkswagen, están empleando cajas de 7 o incluso 8 en Peugeot. No obstante, si el escalonamiento de esas velocidades es correcto, no sería mayor inconveniente. El conjunto se completa con un sistema de tracción integral con varios modos (Terrain Mode) a seleccionar, según el tipo de firme y conducción.
También destaca la suspensión de dureza variable ECS, así como un sistema de aerodinámica activa, Active Air Flap, que ajusta la entrada de aire en función de las necesidades del motor, la temperatura del refrigerante, la velocidad del vehículo y otros parámetros, de forma que se consigue ahorrar unas décimas de litro de combustible.
Al margen del «enchufe», sigue siendo el mismo nuevo Tucson
Por todo lo demás, sigue siendo, y se sigue viendo, igual que el resto de sus hermanos de gama, delatando su mecánica detalles como el anagrama «plug-in» o la tapa del puerto de carga. Por tanto, sigue contando con ese atractivo diseño y grandes posibilidades de equipamiento, con ayudas y asistes a la conducción como el asistente de aparcamiento remoto, mantenimiento de carril o de colisión de aparcamiento, que en principio se ofrecerá en exclusiva asociado a esta mecánica, y que es capaz de frenar el coche dando marcha atrás en un parking si detecta un obstáculo.