Pocos, muy pocos, son los 4×4 que quedan a la venta en España, y todos ellos tienen un alto precio para compensar a su fabricante lo elevado de la media de sus emisiones. Son varios los modelos que podemos entender como referencias dentro de este segmento, desde un Toyota Land Cruiser a un Land Rover Defender pasando por un Discovery o un Ford Bronco, pero todos rondan los 80.000 euros de precio, lo que lo aleja de los bolsillos menos pudientes pero que igualmente se quieren aficionar al 4×4.
En nuestro país, no obstante, existe una opción mucho más económica que los modelos mencionados, y aunque no se puede definir tampoco como un modelo asequible, bien merece la pena ver qué propone con respecto a las alternativas de toda la vida y valorar su compra. Viene de China, se llama ICH-X K2 y es un todoterreno que por 30.000 euros menos que las alternativas arriba señaladas no tiene un bajo precio, pero sí es mucho más barato que estos.
Claves del ICH-X K2
- Pertenece al fabricante Chino BAIC
- Se basa en el BAIC BJ40, un 4×4 que lleva a la venta desde los años 70 en China
- A pesar de su aspecto, sus 4,66 metros de largo lo convierten en un modelo relativamente compacto
- Cuesta desde 54.500 euros
Imágenes del ICH-X K2
Por su imagen, el ICH-X K2 es un radical todoterreno que debe su apariencia, principalmente, a sus proporciones y cotas 4×4. Lo que más destaca es su altura libre al suelo, de 22 centímetros en el punto más bajo, pero lo cierto es que la carrocería está muy por encima de esta cota a tenor la diferencia entre el piso y la misma, fácilmente apreciable en las imágenes.
Medidas de carrocería y cotas 4×4 | |
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Longitud | 4,65 metros |
Ancho | 1,93 metros |
Alto | 1,87 metros |
Batalla | 2,75 metros |
Altura libre | 22 cm |
Profundidad de vadeo | 50 cm |
Ángulo de ataque | 37º |
Ángulo ventral | 23º |
Ángulo de salida | 31º |
También ayuda a acentuar su agresiva imagen una mirada cabreada que queda flanqueada por unos abultados pasos de rueda, que también tienen réplica en el tren trasero. Unas puertas con visagras a la vista y un techo desmontable, así como un portón de acceso al maletero de apertura lateral, acaban de redondear la imagen de 4×4 aguerrido y puro del ICH-X K2.
Imágenes del ICH-X K2
No es todo apariencia en el ICH-X K2, ya que cuenta con un despliegue técnico que ayuda a sacar lo mejor de su motor cuando se adentra en situaciones complicadas. Y es que su caja de cambios automática de 8 relaciones por convertidor de par transmitirá la potencia y tracción al suelo de la debida manera gracias a un sistema de tracción total desconectable con reductora, que además cuenta con bloqueos para los dos diferenciales, delantero y trasero.
También cuenta, de serie, con ganchos que ayudarán a asistir (o ser asistidos) cuando se complique la situación o cuando se tenga que traccionar con alguna carga. Y es que los apliques rojos que se pueden encontrar tanto en sus paragolpes delantero como trasero no son ornamentales y pueden tirar de hasta 1.500 kilos.
Jeep Wrangler, al que se asemeja mucho por imagen.
Imágenes del ICH-X K2
Mecánicamente el esquema que toma lugar bajo el capó no es un sistema eléctrico, o ni siquiera híbrido enchufable, como sucede en muchos todoterreno que están lanzándose en China en estos últimos años. En su lugar encontramos un rocoso turbodiésel de cuatro cilindros y dos litros de capacidad que rinde 163 CV. Lejos de tratarse de un motor eficiente, dada la naturaleza de la carrocería que tiene que propulsar, lo cierto es que el gasto de combustibles no es nada contenido: la propia marca declara que supera los 10 litros de media.
Ficha técnica del motor | |
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Motor | 2.0 turbodiésel |
Potencia máxima | 162 CV |
Par máximo | 380 Nm |
Cambio | Automático de 8 relaciones |
Tracción | Total conectable con reductora |
Extras | Bloqueos de diferenciales delantero y trasero |
Para acabar, en su interior se ha desplegado un diseño que recuerda de manera innegable al de un Mercedes Clase G. Esto es especialmente palpable en la parte central de su salpicadero y la apariencia de los asideros de las puertas, pero también en el diseño de su cuadro de mandos y la consola central. Aun así, por lo que propone y la diferencia de precio con respecto a sus rivales, se trata de todo un chollo que, por contra, es realmente difícil de encontrar en España, pues no se trata de un coche cuya comercialización se haya dado al uso. En Italia sí que es más fácil dar con una unidad del ICH-X K2.