Como es lógico, el código de circulación recoge todas las posibles infracciones que un conductor puede llegar a cometer al volante de su vehículo. Algunas son más comunes que otras, pero la Dirección General de Tráfico ha «levantado las orejas» tras detectar un impresionante aumento en el número de multas impuestas por un mismo motivo: circular sin ITV. Los datos son especialmente alarmantes, duplicando el número de multas en apenas 7 años, pero… ¿qué está pasando en realidad? ¿A qué se debe este aumento tan salvaje en el número de sanciones?
Las ITV llevan entre nosotros décadas y décadas: desde la imposición de inspecciones periódicas de carácter obligatorio en los años 80, millones de vehículos pasan cada año por alguna de las decenas de estaciones de inspección repartidas por todo el territorio nacional en las que se llevan a cabo diferentes pruebas que permiten determinar que un vehículo circula cumpliendo unos mínimos en cuanto a seguridad vial, emisiones contaminantes y cumplimiento de requisitos administrativos.
Como es lógico, circular sin ITV o hacerlo cuando la inspección ha caducado o el resultado de la misma no es favorable supone una infracción que está sancionada con multas más o menos graves dependiendo de cada caso en concreto. Sin embargo, en los últimos años desde las instituciones se ha detectado un aumento muy importante en el número de infracciones de este tipo, hasta el punto de que prácticamente se ha duplicado el número de multas por este motivo en sólo 7 años.
¿Por qué la gente circula sin ITV?
Desde la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos AECA-ITV, recogen un dato verdaderamente salvaje: en 2015 se impusieron 396.666 multas a conductores que circulaban con un vehículo sin la ITV al día. En 2022, último año del que se tienen registros, esa cifra ha alcanzado las 618.375 multas. Se trata por tanto de un aumento muy significativo, hasta el punto de que la DGT ya han comenzado a tomarse en serio este hecho.
No se trata sólo del hecho de circular sin ITV o con ella caducada, es que cada vez más usuarios deciden «pasar» de la ITV, bien porque no quieren o bien porque sus vehículos cuentan con algún defecto que les impide superar con éxito la inspección y, por ello, deciden que ni siquiera merece la pena intentarlo. De cualquier manera, en los últimos años estamos asistiendo también a un progresivo aumento en el «absentismo», hasta el punto en el que los últimos datos apuntan a que 4 de cada 10 vehículos que tenían que haber acudido a la ITV no lo han hecho.
Dentro de esas estadísticas se incluyen también vehículos en situación de abandono pero que siguen de alta, de manera que es evidente que las cifras reales y sobre todo «realistas» son menores.
¿Qué multa me pueden poner por circular sin ITV?
Cuando acudimos a una inspección de ITV podemos recibir diferentes «veredictos». El primero es un resultado favorable, que nos permite seguir circulando de manera legal, pero si nuestro vehículo presenta algún defecto grave nos encontraremos ante una inspección desfavorable. En ese caso, es importante recalcar que es ilegal circular normalmente con nuestro vehículo, pero sí podremos hacerlo para llevarlo al taller y para, posteriormente, volverlo a inspeccionar. Fuera de ahí, la multa será de 200€ como mínimo.
En el caso de que en la inspección se detecten defectos muy graves y que supongan un grave riesgo para la seguridad, el resultado de la inspección será negativa. A partir de ese momento el vehículo no puede circular de ninguna manera por vía pública, y si es detectado haciéndolo su conductor se enfrentará a una sanción de, como mínimo, 500€. Además, es posible que el vehículo quede inmovilizado a partir de ese momento por las autoridades competentes.
Existe también la posibilidad de que, sin haber acudido a la ITV, recibamos una multa por ello. Evidentemente, hablamos de vehículos cuya inspección ha caducado en el tiempo, momento a partir del cual podremos recibir una multa de hasta 200€ y, dependiendo de las condiciones de cada caso, también asistir a la inmovilización del vehículo.
