De entre las muchas batallas que aún ha de ganar el coche eléctrico, la de la autonomía, y la de los tiempos de recarga, es una de las más importantes. El éxito de Tesla, en gran medida, se debe al empleo de baterías con autonomías que en la mayoría de los casos superan los 500 kilómetros. Y también al establecimiento de una red de supercargadores muy potentes, que agilicen el proceso de carga. Pero en los próximos años veremos a fabricantes que, como Jaguar, serán capaces de acercarse a esos registros, e incluso superarlos. La respuesta a Tesla llegará con un Jaguar I-PACE con 500 kilómetros de autonomía y carga rápida en 45 minutos. ¿Será capaz el Jaguar I-PACE de superar los registros de Tesla? Ver guía de coches eléctricos 2018.
Las cargas rápidas de Jaguar y Tesla
Según anuncia Jaguar, el nuevo Jaguar I-PACE será capaz de recargar hasta un 80% de la capacidad de sus baterías, desde cero, en solo 45 minutos. Eso significa obtener 400 kilómetros extra de autonomía – siempre teórica – en 45 minutos. Tesla, por ejemplo, promete recargas en tiempos similares, o incluso más rápidos, recargando el 80% de las baterías de su Model S, una autonomía de hasta 475 kilómetros, en 40 minutos. En estos tiempos de carga, podría decirse que tanto Jaguar, como Tesla, estarían en un empate técnico a la hora de hablar de la tecnología de sus coches.
Tesla Model S
Por otro lado, es importante que tengamos en cuenta otro aspecto. Jaguar promete estos tiempos de carga empleando sistemas de carga de 100 kW. La carga más rápida del Tesla Model S, la que mencionamos en este artículo, se alcanzaría empleando cargadores más potentes, como los supercharger de 135 kW.
Contar con tecnologías de carga rápida como estas es sumamente importante para coches eléctricos que pretenden salir del ámbito urbano. En el día a día, lógicamente, el cliente del Jaguar I-PACE no empleará, ni necesitará, sistemas de carga tan rápidos y potentes. Pensemos que la instalación de un sistema de carga con potencia suficiente para alcanzar los tiempos mínimos de la carga rápida no es sencillo, ni barato.
Los sistemas de carga rápida están pensados para trayectos largos, por carretera, y para el empleo de puntos de carga en estaciones de servicio, o estaciones como las Supercharger que ofrece Tesla. En el día a día, los eléctricos han sido pensados para permanecer aparcados durante muchas horas, mientras trabajamos, o durante la noche, recargando poco a poco sus baterías para ofrecernos la máxima autonomía al día siguiente.
Mientras tanto, Jaguar sigue puliendo los últimos detalles del nuevo Jaguar I-PACE, un crossover eléctrico que nos presentarán el 1 de marzo, y que estará presente en apenas un mes en el Salón de Ginebra. Las últimas pruebas se habrían llevado a cabo en Suecia, muy cerca del Círculo Ártico, en la localidad de Arjeplog (véase nuestra experiencia conduciendo un Nissan GT-R sobre los lagos helados de Arjeplog en 2015).
Las pruebas invernales son importantes para cualquier coche, pero aún más para los eléctricos. Las temperaturas extremas pueden afectar notablemente al rendimiento de las baterías. Los eléctricos son también una opción muy demandada en los países nórdicos. Con lo cual los fabricantes han de asegurar que sus coches eléctricos, y sus baterías, son capaces de trabajar incluso a temperaturas de -40ºC.