Hemos insistido en más de una ocasión que las posibilidades del coche conectado van mucho más allá de lo que nuestra imaginación pueda alcanzar en estos momentos y abren un panorama en el que, estamos convencidos, los desarrolladores más ingeniosos podrán crear funcionalidades tan útiles como un sistema capaz de predecir el tiempo. Y el mejor ejemplo lo tenemos en la última idea de los ingenieros de Jaguar y Land Rover que ya han concebido una tecnología que permitiría a sus coches convertirse en un eficaz «hombre del tiempo», capaz de predecir las condiciones meteorológicas que nos encontraremos en nuestra ruta. ¿Y cómo funcionaría?
Las predicciones meteorológicas, y el parte que nos proporciona el «hombre del tiempo» en los telediarios, se basa en los datos recopilados por diferentes fuentes de información. Hablamos de satélites, de globos sonda, pero también de estaciones meteorológicas terrestres que trabajan con datos tan sencillos de obtener como la temperatura, la presión o la humedad.
Ahora bien, imaginemos una red con millones de vehículos conectados que puedan trabajar como potenciales estaciones meteorológicas. Imaginemos un sistema central capaz de procesar toda esa información. E incluso vayamos más allá, y pensemos en sistemas de aprendizaje automático, capaces de aprender con la experiencia, de los errores, y corregir sus predicciones en función del éxito que tuvieron a la hora de realizar una predicción en el pasado, en función de ciertos parámetros.
Esa es la idea que Jaguar Land Rover patentó (ver patente de Jaguar Land Rover) y que ahora querrían poner en práctica en sus vehículos, tal y como leíamos estos días en el Daily Mail. Pensemos que los sensores de temperatura, presión o humedad, o incluso intensidad de luz, son tan sencillos como económicos. Y que el coche conectado abriría por completo la posibilidad de acumular millones de datos por segundo, y procesarlos de inmediato para obtener una predicción muy precisa de lo que sucederá en el lugar en el que nos encontramos, y en la ruta que sigue nuestro coche.
pero a la vez inteligentes, como esta predicción del tiempo que plantea una patente de Jaguar Land Rover
Jaguar Land Rover pretende utilizar esa información para adaptar multitud de sistemas a las condiciones meteorológicas cambiantes. Ya no hablamos únicamente de accionar el limpiaparabrisas cuando llueva, y ajustar la cadencia y la velocidad de barrido a la intensidad de la lluvia. Hablamos de ajustar automáticamente la temperatura y la intensidad del climatizador, de cerrar el techo practicable antes de que llueva, o incluso de ajustar el control de tracción ante la previsión de posibles precipitaciones.
La idea parece tan brillante, como sencilla, e interesante. Solo queda esperar para conocer si definitivamente la aplicarán en la nueva generación de coches conectados.