Seguramente te has percatado del gran despliegue policial y de las numerosas calles de Madrid cortadas a según qué horas, todo por motivo de la cumbre de la OTAN. Dicho acontecimiento está teniendo lugar en la capital española, y son diversos dirigentes los que han hecho acto de presencia por estos lares, tales como Joe Biden. A nivel automovilístico no debería tener demasiada relevancia, y sería así si no fuese porque el Presidente de los Estados Unidos se moverá estos días en «La bestia», o lo que es lo mismo, una de las limusinas más seguras del mundo.
Poco se sabe realmente acerca de este armatoste de más de 5 metros de largo y más e 8 toneladas de peso. Y no es para menos, ya que desvelar al mundo los secretos del coche más seguro no sería lo más inteligente. No obstante, y pese a las conjeturas y rumores acerca de estas, he aquí 5 curiosidades sobre «La bestia», la limusina a prueba de todo.
1. Armado y protegido hasta los dientes
Que «La bestia» sea el coche más seguro del mundo no es un decir, realmente lo es. Y es que ahí radica uno de los principales motivos por lo que este coche es tan sumamente pesado, ya que cuenta con una carrocería bajo la cual se esconde una armadura blindada de 20 centímetros de grosor de acero y kevlar capaz de aguantar infinidad de ataques, incluso aquellos procedentes de bombas. Aparentemente cada una de las puertas pesa lo mismo que la de un Boeing.
A ello debemos sumarle también unos cristales blindados de casi 13 centímetros de grosos capaces de aguantar el disparo de una Magnum del calibre 44. Además, el interior puede sellarse para soportar ataques químicos, y cuenta con bombonas de oxigeno para respirar igualmente.
Y si piensas que el punto débil de la limusina del Presidente de los Estados Unidos está en los neumáticos, estás muy equivocado. Aunque estos pinchen tienen capacidad para recorrer igualmente 100 kilómetros, distancia que puede ser clave para escapar de posibles peligros.
La cosa se pone más fantasiosa cuando hablamos de ciertos elementos más propios de una película que de la realidad, pero en este coche todo es posible. Y es que los rumores indican que los tiradores de las puertas están electrificados, y pueden producir descargas de hasta 120 V. También se habla de que «La bestia» cuenta con gas lacrimógeno en sus bajos y con una cámara de visión nocturna, siendo esto último bastante creíble y obvio. Por supuesto, también cuenta con armas instaladas en las propias puertas.
2. «La bestia» está equipada con un frigorífico lleno de bolsas de sangre
Pese a que la limusina de Joe Biden está pensada para reducir el daño de cualquier ataque al mínimo, puede suceder que sean heridos. En caso de que eso suceda y de que el Presidente comience a perder sangre, «La bestia» está preparada para evitar daños mayores de camino al hospital.
Y es que en el interior de esta mezcla de Cadillac con una camioneta de GMC se encuentra un frigorífico lleno de bolsas de sangre. Estas contienen sangre del mismo tipo que la de Joe Biden, asegurándose así poder realizar una transfusión en caso de necesidad.
3. Existen, como mínimo, dos unidades de «La bestia»
En cualquier evento en el que el Presidente haga acto de presencia a bordo de su limusina, aparece siempre otra. Esto es por razones de seguridad, ya que si hay algún atacante en las inmediaciones pensando en llevar a cabo alguna mala acción, tendrá complicado la tarea de saber en cuál de los dos coches se encuentra Joe Biden.
No obstante, durante el evento de inauguración tras salir elegido Biden como presidente se llegaron a ver hasta siete unidades de «La bestia». Esto se debe, en parte, a que durante cada 8 años el coche del presidente de Estados Unidos se renueva no solo con mejoras de seguridad, sino también estéticas. Fue en aquel momento cuando desplegaron 7 de las unidades que se han fabricado durante diferentes mandatos.
4. «La bestia» ha costado mucho, pero que mucho dinero
Lógicamente crear uno de los coches más seguros del mundo no es barato, y «La bestia» de Joe Biden no es una excepción. En una primera instancia, la limusina del presidente de Estados Unidos fue valorada en 1,5 millones de dólares, que ya es una cifra considerablemente alta para lo que sería, en condiciones normales, una berlina de Cadillac.
Pero hace cuatro años, cuando se culminó el desarrollo de «La bestia» que sirvió a Donald Trump y que actualmente sigue cumpliendo con mismo cometido pero con Joe Biden, General Motors habló de un gasto de 15 millones de dólares para concebir el búnker con ruedas que es este coche, así como todos los artefactos que incorpora.
5. Un sistema de comunicación propio de una película
El grosor que implica el blindaje tanto de carrocería como de cristales de «La bestia» es tal, que esta se encuentra sumamente insonorizada. Esto provoca que el coche de Joe Biden esté equipado con micrófonos en el exterior y altavoces en el interior para poder escuchar lo que sucede fuera.
Además, «La bestia» está equipada con un sistema de comunicación interna cerrado que sirve para poder hablar con seguridad con el equipo secreto del presidente y con todos aquellos que acompañen a este en sus comparecencias públicas.
Como curiosidad, se dice el propio coche cuenta con un sistema capaz de admitir los códigos necesarios para iniciar la cuenta atrás de un despliegue de armamento nuclear.