KIA estrena nuevo logotipo, y no es un cambio que debamos pasar por alto. El fabricante coreano propiedad de Hyundai Motor Group junto a las marcas Hyundai y Genesis, se adentra en un nuevo e importante cambio de imagen. Cuando una marca decide cambiar por completo su imagen, logotipo y eslogan lo hace bajo una idea muy clara, y por ello hoy vamos a intentar descubrir qué es lo que pretende KIA con esta renovación de su logo e imagen de marca.
A partir de ahora KIA usará en todos sus modelos el nuevo logotipo que podéis ver en portada, un logotipo que de hecho ya fue mostrado por primera vez a través del prototipo Imagine Concept, que como bien a punta su nombre, ya dejaba entrever lo que sería la marca y sus productos en un futuro próximo. Con este nuevo logotipo lo que pretende KIA es ofrecer unos valores nuevos y diferentes, reinventando en cierto modo cuál es la imagen que proyecta su marca. Este diseño, según explica KIA, busca ofrecer una imagen de simetría, ritmo y crecimiento.
Y junto a este nuevo logo también nos encontramos un nuevo eslogan, cambiando el conocido «The power to surprise» por «Movement that inspires». Y es aquí donde más claro queda el cambio de rumbo que quiere emprender el fabricante coreano con esta nueva imagen. KIA pretende afianzar su estrategia de electrificación para no ser solo una alternativa, sino un fabricante líder en la industria. Recordemos que la apuesta de KIA y Hyundai en este sentido es clara, ofreciendo todas las variantes electrificadas posibles en sus modelos, buscando así captar clientes en un mercado repleto de incertidumbre y sin demasiado donde elegir si nos centramos en un coche en concreto.
A esta estrategia se añade ahora la intención de convertir a KIA en una pieza clave en servicios de movilidad, dejando claro que KIA jugará un papel fundamental en esa nueva forma de entender el automóvil que poco a poco está llegando a las calles. La propiedad del vehículo parece cada vez menos interesante para fabricantes y clientes, poniendo en el mercado sistemas de suscripción donde el cliente paga por servicios, nada más. Y ahí es donde KIA pretende hacerse fuerte, una idea que Genesis como fabricante de lujo del grupo también tiene serias intenciones de explorar.
Echando la mirada atrás, KIA ya nos ha demostrado que tiene capacidad de sobra para reinventarse, y para ello solo hay que comparar un KIA Opirus (2004) con un KIA Stinger (2017). Así, mientras en el pasado más reciente han demostrado poder mejorar lo suficiente para enfrentarse – cuando no superar – a sus rivales generalistas, llegado el momento de afrontar la transición que vive actualmente el sector, KIA lo apuesta todo a la electrificación y los servicios de movilidad.