El KIA Sonet acaba de ser presentado en la India. Ha sido concebido con ese enorme mercado en mente, un país emergente que cada vez cuenta con mayor pujanza económica y una creciente clase media con ansias de motorización. El KIA Sonet llega al mercado tras el KIA Seltos, también fabricado en India y no disponible en Europa, pero sí en mercados como el de Estados Unidos. ¿Es el mundo capaz de digerir otro SUV más, en una interminable lista de todocaminos? ¿Qué ofrece el KIA Sonet que no ofrezca su competencia? ¿Llegará a venderse en Europa?
Vayamos paso a paso. En primer lugar, el KIA Sonet goza del característico diseño de la marca. Su frontal tiene la famosa «tiger nose» como calandra y en su tamaño inferior a los cuatro metros de longitud combina formas angulosas, una altura considerable y un packaging muy compacto. Su frontal tiene detalles muy marcados, tanto en paragolpes como en capó, en ambos casos cuajados de personalidad. Quizá demasiada. Lo mismo podemos decir de la zaga, donde un pilar C recargado se une a unas ópticas LED que atraviesan el ancho del coche.
Por si fuera poco, en la zaga también tenemos escapes falsos y un difusor decorativo. Es un coche efectista, que sigue la filosofía mucho ruido y pocas nueces. El KIA Stonic, el B-SUV de KIA en Europa, es un coche bastante más refinado y de diseño más logrado, más del gusto europeo. No obstante, donde el KIA Sonet sí brilla es en lo tocante al habitáculo. Su diseño es vanguardista y anticiparía futuros lanzamientos de la marca, especialmente en lo tocante a la integración de instrumentación semi-digital y equipo de infoentretenimiento en el mismo panel.
Una solución que cada vez vemos en más marcas y que llega a KIA por primera vez. El equipo de infoentretenimiento es el avanzado UVO Connect con pantalla de 10,25″, en constante conexión a internet, dotado de actualizaciones OTA y con la posibilidad de interactuar con el vehículo a través de una app de móvil. Poder abrir o cerrar el coche o localizarlo desde el teléfono es una novedad en vehículos del segmento B de la marca, uniéndose al renovado KIA Stonic en su dotación. La seguridad activa y las asistencias a la conducción también rayan a un alto nivel.
A nivel técnico, estará disponible con un motor 1.2 atmosférico de gasolina y 84 CV, al que se unirán los motores 1.0 T-GDi turbo de tres cilindros, y un diésel 1.5 CRDi de cuatro cilindros. Estará disponible tanto con cambio automático de doble embrague como con la nueva caja de cambios iMT manual con embrague by-wire. Habrá opción a equipar tracción total inteligente, algo a valorar en según que zonas climáticas. Con todo, parece poco plausible que desembarque en Europa, donde su segmento está muy bien cubierto por el KIA Stonic, de fabricación comunitaria.