Los coches eléctricos se han proclamado como la solución a las emisiones de gases con efecto invernadero y como los que nos ayudarán a alcanzar la tan ansiada descarbonización. Por supuesto, hay opiniones de todas, desde los que están de acuerdo hasta los que piensan que la fabricación de los coches eléctricos es bastante contaminante. Y es que quizá en la electrificación del parque automovilístico, no todo es tan bonito como se cree.
Camiones eléctricos cargados con gas natural
Prologis y Performance Team, han inaugurado un depósito de carga para camiones eléctricos pesados cerca de los puertos de Los Ángeles y Long Beach. Un depósito que puede cargar hasta 96 camiones simultáneamente. Los cargadores son de 360 kW y están fabricados por Zerova, pueden cargar hasta el 80% en 90 minutos.
¿El problema? Bueno, pues que esta estación de carga actualmente está alimentada con gas natural. El gas natural produce CO2, por lo tanto, contaminamos el medio ambiente igualmente.
No está pensado para funcionar con gas natural
Es lógico pensar que estas estaciones podrían estar alimentadas con otro tipo de energía, como por ejemplo eólica o solar. La cosa es que este proyecto no tiene suficiente superficie para la energía que necesita.
Sin embargo, Prologis asegura que los generadores lineales que utilizan para alimentar la estación de carga están listos para el hidrógeno. Por lo que, podemos pensar que realmente la estación está pensada para alimentarse con hidrógeno y no con gas natural.
El problema es que la empresa dice que de momento no tienen un cronograma para el hidrógeno, aunque sí dicen que están utilizando el gas natural a corto plazo, y que están trabajando con el Departamento de Agua y Energía de Los Ángeles para determinar cuándo estará lista la red para conectarla.
Lo que no sabemos de los cargadores
Cuando cargas tu coche en carretera, ¿sabes realmente qué es lo que alimenta esa red de carga, ¿podrías asegurar que no es gas natural? La única diferencia es que esta empresa sí que ha dicho que utiliza en su microrred, pero también ha dicho que es algo temporal.
Lo bueno de estas redes de carga es que sirven para cargar los vehículos eléctricos y que estos no quemen combustible y contaminen más la atmósfera. Es más, algunas como Prologis pueden cambiar a combustibles sostenibles para alimentar las redes de carga. Quizá solo necesitamos producir más hidrógeno o energía solar o eólica para poder convertir todos aquellos puntos de carga en totalmente limpios.
Eso es justamente lo que está intentando hacer Estados Unidos con su objetivo de electricidad 100% limpia para 2035.