El año pasado, el Nürburgring Nordschleife fue el escenario de encarnizadas batallas por el título de coche de producción más rápido. Envuelto en una gran polémica, a principio de año pasado el Lamborghini Huracán Performante establecía un récord de 6 minutos y 52 segundos. Récord que era arrebatado por el Porsche 911 GT2 RS a los pocos meses, con un tiempo de 6 minutos y 47 segundos. Actualmente la corona sigue en manos de Porsche, pero el futuro Lamborghini Aventador SVJ y el Corvette ZR1 ya están rodando en el Nordschleife… con ganas de marcha.
El Lamborghini Aventador SVJ será la versión más radical y extrema del Aventador. No se sabe demasiado del coche – aunque se han filtrado algunas imágenes oficiales hace unas semanas – pero se estima en unos 800 CV la potencia de su V12 de 6,5 litros, afinado al límite físico de sus posibilidades. Será el más rápido y eficaz de todos los Aventador, y la clave no estará tanto en su tren de rodaje, sino en su aerodinámica. Todo apunta a que combinará elementos fijos con el sistema ALA de aerodinámica activa estrenado en el Huracán Performante – y clave absoluta de su increíble tiempo en el ‘Ring.
Lamborghini Aventador
Varias unidades llevan tiempo rodando en el circuito alemán. Con un peso inferior al del Lamborghini Huracán, más potencia y una aerodinámica activa, está claro que los de Santa Ágata tienen el récord del Porsche 911 GT2 RS en sus miras. Para muestra un botón: bajo estas líneas podéis ver el espectacular rendimiento del Lamborghini Aventador SVJ, tomando «a fuego» algunas de las curvas más complicadas del circuito alemán. Si os fijáis bien, al final del vídeo el italiano parece estar seguido de cerca por otro deportivo de lo más interesante…
Ese coche es el Corvette ZR1, el Corvette más radical y potente jamás fabricado por Chevrolet. En cierto modo es un fin de fiesta para los Corvette C7, a los que les queda a lo sumo año y medio a la venta. La próxima generación de los Corvette pasará a usar motores biturbo, posiblemente situados en posición central-trasera. Por tanto, podríamos decir que este ZR1 será el último a la vieja usanza. Y no piensan despedirse tímidamente: bajo su capó hay un motor 6.2 V8 sobrealimentado por compresor hasta los 755 CV de potencia. Aún puede encargarse con una caja de cambios manual.
A esta bomba sobrealimentada se une una aerodinámica excepcional y un tren de rodaje absolutamente enfocado en el máximo rendimiento en pista. ¿Os habéis fijado en lo ensanchado que está el coche? Un equipo de frenado carbonocerámico y una suspensión magnetoreológica ponen la guinda a un cóctel explosivo. Corvette ya demostró con el anterior ZR1 que los coches americanos se defienden de maravilla en un circuito como el Nordschleife. Este nuevo ZR1 tiene casi 120 CV adicionales y con toda seguridad bajará de los 7 minutos por vuelta. ¿Suficiente para llegar al nivel del Porsche 911 GT2 RS?
En este vídeo podéis ver sus pruebas en el Infierno Verde, con un silenciador para sus escapes, de demasiado volumen para una carretera pública como es este circuito.
