Nos quitamos el sombrero ante la última creación de Lamborghini, un prototipo que desdibuja la frontera entre el Lamborghini Huracán y el Lamborghini Urus. Con este prototipo, según nos cuentan, completamente funcional, Lamborghini se hace eco a una de las últimas modas en el mundo de las preparaciones. Llámalo off-road o llámalo overland, pero convertir deportivos en coches todoterreno comenzó con algunos Mazda MX-5 y parece una tendencia imparable. El Huracán Sterrato es un superdeportivo diseñado para salir del asfalto, el eslabón perdido entre el Lamborghini Huracán y el Lamborghini Urus.
Los cambios afectan a no pocos elementos del coche. El coche ha recibido un agresivo kit de carrocería, en el que llaman la atención unos pasos de rueda muy ensanchados – construidos en plástico oscuro y con sus clásicos remaches. Las protecciones para los bajos son completamente funcionales, al igual que los guardabarros traseros, el spoiler fijo trasero, la barra frontal de LEDs o los faros «cuneteros» instalados en su frontal. Es un proyecto muy atrevido, complementado por un agresivo vinilado, más propio de un youtuber o un vlogger adinerado. Es una auténtica locura de coche.
Lamborghini Huracán EVO
El coche no solo parece mucho más ancho, lo es: el ancho de vías ha crecido en 30 mm y en las llantas de 20 pulgadas se han instalado neumáticos diseñados para salir con garantías del asfalto. Su suspensión ha sido modificada, y el coche se encuentra ahora a 47 mm más de distancia del suelo. Gracias a ello, el ángulo de ataque del coche ha mejorado un 1%, y el ángulo de salida ha mejorado un 6,5%. Por si esto fuera poco, el sistema de tracción total permanente del Lamborghini Huracán Evo y su reparto de par ha sido puesto a punto con el rendimiento todoterreno en mente.
Su sistema de cuatro ruedas directrices y su suspensión adaptativa son capaces de anticipar las reacciones del coche en terrenos de baja adherencia, una puesta a punto derivada de la experiencia de los de Santa Ágata con el Lamborghini Urus. Y es capaz de soportar un auténtico abuso fuera del asfalto: su difusor trasero hace las veces de cubrecárter y el kit de carrocería hace las veces de deflector, protegiendo de rocas e impactos a la admisión y sistema de escape, elementos delicados.
El interior también refleja este carácter duro y aventurero, con una jaula antivuelco construida en titanio, paneles de suelo construidos en aluminio, baquets construidos en fibra de carbono y arneses de cuatro puntos. A nivel de motor, conserva el puntiagudo 5.2 V10 atmosférico del Lamborghini Huracán Evo, con una potencia máxima de 640 CV. No sabemos si se producirá en serie, pero tened por seguro que este prototipo busca medir el interés público por un proyecto como este. Para la marca sería sencillo desarrollar un producto como este, y quizá venderlo como una serie limitada. Desde Diariomotor aplaudimos el arrojo de Lamborghini: pocas marcas siquiera se atreverían a lanzar un prototipo como este.