Lamborghini explora un futuro en el que, por suerte, o por desgracia, acabarán prescindiendo de sus motores V10 y V12. Y no solo eso. Prescindirán de motor de combustión. En lo que a priori puede parecer una mala noticia, la marca de Sant’Agata ha visto una oportunidad, la de crear deportivos aún más espectaculares en los que la tecnología será clave para mantener las cualidades que hasta ahora esperábamos de un Lamborghini. El resultado de esta investigación se llama Lamborghini Terzo Millennio, y es un deportivo futurista y espectacular que ha sido desarrollado en colaboración con el MIT, la universidad de la que han salido más de 70 premios Nobel. ¿Y cuáles son las 4 claves de este deportivo?
1. Energía
Es una lástima que Lamborghini aún no haya entrado en demasiado detalle al respecto de la técnica de este deportivo y que estemos sobre todo ante muchos planteamientos teóricos. Lo que sí sabemos es que prescindiría de motor de combustión interna para optar por un sistema de motores eléctricos de alta eficiencia que, como tal, podría recuperar mucha energía cinética y suministrar grandes picos de potencia. Para conseguirlo, Lamborghini imagina un deportivo que tendría que emplear sistemas de acumulación potentes y simétricos, de manera que las baterías actuales no serían suficiente, y piensa ya en sistemas de supercondensadores que, con una alta densidad de potencia, fueran capaces de trabajar en las condiciones esperadas en un superdeportivo.
2. Materiales
La idea de Lamborghini no deja de ser transgresora, también a la hora de hablar de los materiales. Los de Sant’Agata y el MIT han concebido, desde el ámbito teórico, un deportivo en el que incluso los paneles estructurales y la carrocería podrían contar con la capacidad de funcionar como elementos de almacenamiento energético, gracias a la tecnología de nanomateriales y a la difusión de cargas entre paneles de materiales compuestos y reforzados por fibra de carbono. De manera que todo el coche, en su estructura, trabaje como una batería.
Otro de los objetivos de este proyecto, que esperemos nos vayan contando con más detalle en los próximos meses, pasaba por monitorizar el estado de todos los paneles de la carrocería y la estructura mediante un sistema que, por ejemplo, nos ofrezca un detalle de daños muy avanzado y exhaustivo en la eventualidad de un accidente.
3. Arquitectura de vehículo
Estas tecnologías brindan otra oportunidad a Lamborghini. El diseño espectacular de los Lamborghini modernos, con su frontal en forma de cuña, se lo debemos sobre todo a la arquitectura de motor central escogida por la marca de Ferruccio desde los tiempos del Lamborghini Miura. La electrificación, que permitiría emplear motores más pequeños e independientes en cada eje, interconectados por cables, dejaría la carrocería completamente despejada y ofrecería la máxima libertad al diseñador para crear un deportivo con un diseño tan atrevido como el que vemos en estas imágenes, como el Lamborghini Terzo Millennio. Un prototipo en el que salta a la vista cómo la cabina se ha adelantado aún más, hasta prácticamente quedarse sin voladizo delantero.
4. Sonido y emoción
Pero Lamborghini también ha de afrontar un problema importante. ¿Qué transmitirá el Lamborghini del futuro sin motor V10 o V12? ¿Cómo sonará? Dice Lamborghini que han abordado este problema para resolverlo, para conseguir que la electrificación siga transmitiendo sensaciones a su conductor definiendo un sonido. Pero de nuevo no nos han aclarado qué van a hacer para conseguirlo.
