Los Land Rover Defender, hasta la llegada de la nueva generación, fueron en gran parte herramientas de trabajo. De hecho, fueron concebidas con la dureza y la practicidad pura y dura en mente. Más de 70 años después de su concepción, los nuevos Land Rover Defender siguen siendo todoterrenos de grandes capacidades, pero su precio y posicionamiento los relegan a ser coches destinados a familias aventureras y adineradas. La gran noticia es que Land Rover no olvida su pasado, y en absoluto cierra la puerta a una versión pick-up del Defender.
Nick Collins es el director ejecutivo de desarrollo de vehículos en Land Rover y ha confirmado que no existen limitaciones estructurales para el desarrollo de una pick-up sobre la base del Land Rover Defender. Como ya sabéis, al contrario que su predecesor, el Defender está construido en torno a una plataforma monocasco. Aunque pick-ups como las Ford Ranger o Toyota Hilux emplean un chasis de largueros tradicional, existen pick-ups de orientación más lúdica construidas en torno a monocascos. Un ejemplo rápido son las honda Ridgeline estadounidenses.
Land Rover Defender
La desventaja de una pick-up construida sobre una plataforma monocasco está en una menor rigidez y especialmente, en una capacidad de carga inferior. Dejando a un lado estas limitaciones – que siempre pueden solucionarse desde un punto de vista técnico – Nick Collins confirma que puede construirse una pick-up sobre una plataforma monocasco, y «que habrá un Defender con carrocería pick-up si hay suficiente demanda». Desde el principio se concibió a los nuevos Defender como una «familia», y el constante lanzamiento de nuevas versiones es prueba de ello.
Aunque no hayan fijado una fecha para este lanzamiento, la realidad es que la puerta está abierta para un Defender pick-up. Esta nueva versión del Defender estaría basada en las versiones 110 de batalla larga, y es posible que incluso se presentase con una batalla aún más larga. Sería un vehículo dirigido a la línea de flotación de coches como el Jeep Gladiator, además de ser una alternativa a las nuevas Nissan Frontier e incluso a las Toyota Tacoma en mercados como Estados Unidos – sí, EE.UU. sería su principal mercado.
De marcado carácter lúdico, no descuidaría sus acabados, equipamiento o comodidad interiores, igual que tampoco descuidaría una selección amplia de mecánicas, tanto diésel como gasolina, sin descartar híbridos enchufables y versiones 100% eléctricas a futuro. Incluso sería candidata ideal para recibir un motor V8 de altas prestaciones, cuyo lanzamiento en los Defender convencionales debería estar al caer. En cualquier caso, esta versión no llegaría antes de 2022, siquiera antes de 2023. ¿Créeis que hay hueco en el mercado para un Defender pick-up?
Fotos del Land Rover Defender 110
Fuente: Autocar