Si necesitamos más autonomía en un coche eléctrico, la solución habitual es usar una batería más grande. Esta es una máxima bastante presente en la industria del automóvil actual, pero no por común es acertada, tal y como ha demostrado la revolucionaria propuesta del Mercedes Vision EQXX enfocada en conseguir la máxima eficiencia. Quizá ha llegado el momento de pensar más en consumos y pérdidas energéticas, y es por ello por lo que el Vision EQXX es una importante lección sobre cómo debería diseñarse la próxima generación de vehículos eléctricos.
Teniendo en cuenta que el Mercedes EQS es el actual referente tecnológico de la marca en el mercado, Mercedes no ha dudado en comparar constantemente al Vision EQXX con el EQS para demostrar los avances que presenta este prototipo. Y la clave para entender esta comparativa la encontramos en que ambos coches eléctricos no podrían ser más diferentes desde el punto de vista de su concepción.
Las principal novedad que nos presenta el EQXX es el hecho de que para conseguir maximizar su autonomía, en lugar de usar una batería de mayor capacidad, han apostado por un acumulador capaz de conseguir una capacidad muy similar a la del EQS (100 kWh), pero reduciendo su peso en un 30% y su volumen en un 50%. Según Mercedes el Vision EQXX arroja un peso de 1.750 Kg, un recorte bastante notable con respecto a los 2.500 Kg que alcanza el EQS 450+.
Esta batería emplea además una nueva química para las celdas, una nueva arquitectura de 900 voltios y un sistema de refrigeración pasiva, consiguiendo de este modo reducir el consumo hasta los 10 kWh/100 Km y llevar la autonomía hasta los 1.000 km por cada carga completa.
A título comparativo, un vehículo como el EQS 450+ ofrece un consumo medio 16,7 kWh y una autonomía de hasta 741 Km, ambos datos bajo ciclo de homologación WLTP.
Junto al recorte de peso y el uso de un nuevo propulsor eléctrico de 204 CV, la gestión térmica y el consumo se han optimizado hasta conseguir una eficiencia energética del 95%, lo que significa que el 95% de la energía almacenada en las baterías del EQXX será transformada en movimiento. Este dato es un valor bastante elevado, y aunque no suele ser un valor que los fabricantes comuniquen con facilidad, lo cierto es que es difícil ver coches capaces de superar el 90%. Solo nos quedaría por saber el dato de eficiencia durante la recarga, un valor que también es crucial a la hora de hablar de pérdidas energéticas por culpa de la transformación de la electricidad desde el Wallbox hasta la batería.
Por lo tanto, Mercedes ha recordado que hay más formas de conseguir mayores autonomías que el uso de baterías más grandes. Lo propuesto por el Vision EQXX no es precísamente nuevo, y de hecho coches como el Opel Eco Speedster o el Volkswagen XL1 ya hicieron demostraciones similares en el pasado, por lo que la industria debería tomar buena nota y centrar sus esfuerzos en reducir peso y consumo de cara a la próxima generación de coches eléctricos a baterías.
