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La lección de seguridad que las marcas, chinas en particular, parecen no entender

Hay un elemento, uno en particular, en el que distinguimos el interior de un coche moderno de uno antiguo. No es el volante o los pedales, podría ser la consola central o incluso el cuadro de mandos, aunque los hay digitales ya desde la década de los ochenta. Hace unos años hubo casos de masificación de botones físicos en la consola central, pero el problema de hoy es justo lo contrario. Y cómo afecta a la seguridad.

Las pantallas táctiles permiten agrupar una gran serie de funciones… ¿pero es lo más ergonómico?

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Nos referimos, evidentemente, a la proliferación de pantallas táctiles donde se engloban funciones que antes se controlaban perfectamente mediante botones físicos. Una tendencia que fue a mayor conforme más grandes eran las pantallas y que en varios coches del mercado podemos ver cómo contribuyen a un habitáculo más diáfano, minimalista, con muy buena presentación, pero sin botones físicos que se agradecerían.

En particular, funciones como el HVAC, la radio o incluso algunos sistemas ADAS sencillos, son los que uno quiere tener más a mano con botones físicos. Si se operan de manera exclusiva con pantalla táctil (los controles por voz aún tienen una efectividad algo dispar) es necesario o bien parar el vehículo porque, por cuestiones de seguridad, el sistema así lo indica, o bien operarlo mientras se desvía la atención de la carretera.

Un estudio en 2022 demostró la eficacia de los botones físicos de toda la vida

Volvo Ex90

Ya en 2022, como puedes leer aquí, la revista sueca Vi Bilägare publicó un estudio en torno a esta cuestión. En este estudio, los conductores tenían que realizar varias funciones con varios coches modernos, así como en un Volvo V70 de 2005 con botones físicos.

Los resultados son abrumadores: en el Volvo tardaban unos 10 segundos, recorriendo 306 metros a 110 km/h. Otros coches modernos salían bien parados mientras que otros necesitaban cerca de un kilómetro para realizar esos ajustes (es decir, más de medio minuto) como el BMW iX o el SEAT León. El peor caso fue el del MG Marvel R, necesitando 44,6 segundos y una distancia de 1.372 metros.

Interiores diáfanos…quizás demasiado

Volvo Ex90

Y no es casualidad que fuera precisamente un vehículo chino (aunque MG tenga su departamento de diseño en Londres) el que tenga este resultado. El ejemplo de fabricar interiores donde todo gira en torno a la pantalla táctil se está viendo sobre todo en marcas procedentes de China o con capital chino, donde el énfasis se sitúa sobre todo en el aspecto tecnológico y en la experiencia de usuario, además de interiores ostentosos.

Ahora bien, todo esto juega en contra de, además de la ergonomía del coche, de la seguridad. En este estudio se ha visto como, para algo que con botones físicos se necesitarían 10 segundos, en un sistema orientado en una pantalla táctil se llega a tardar hasta casi 45 segundos. Algunos fabricantes, además del control de voz, ofrecen accesos directos a funciones básicas, como el HVAC o la radio – pero aún así, es desviar la atención y/o la mirada.

Sí a la tecnología, pero no a las distracciones al volante

Como ya hemos visto, es un problema global, pues tanto fabricantes europeos como los citados BMW y SEAT (Grupo Volkswagen, por ende) como americanos, en particular Tesla, pecan de esto. Es una tendencia del mercado que parecía incluso revertirse, pero ahora la vemos con más intensidad incluso que antes.

Naturalmente, la tecnología tiene que seguir evolucionando en el mundo del motor, con la industria a punto de alcanzar la conducción autónoma con ejemplos ya visibles en Europa. Ahora bien, esta ha de ir casada con la seguridad y no comprometerla con más distracciones, siendo precisamente este el principal motivo de accidentes de tráfico en nuestro país según la DGT.

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¡Muy bueno!

David Durán

Habiéndose criado a pocos kilómetros del Circuito de Jerez y viendo cierto trío de ingleses hablando de coches desde pequeño, para David Durán decantarse por el mundo del motor no le fue difícil. Desde que se cruzó con un Ferrari F40 y un Lamborghini Diablo en plena carretera en un 'simple' viaje familiar, siempre ha querido estar ligado a la automoción. Seguir leyendo...

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