En el Salón de Shanghai acaba de presentarse la octava generación de una de las berlinas más importantes del mundo: el Lexus ES. Es un coche completamente nuevo, que se reposiciona de forma notable dentro de la gama de la marca de lujo de Toyota. Crece 16,5 cm hasta los 5,14 metros, es más tecnológico que nunca y por primera vez en su historia, tiene dos mecánicas eléctricas, además de una versión híbrida. Sigue siendo la berlina más fiable del mercado, pero sacrifica su elegancia para convertirse en un coche a prueba de futuro.

Lexus ES
Un Lexus a prueba de futuro
El Lexus ES de octava generación sigue estando construido sobre la plataforma modular TNGA-K de Toyota/Lexus, pero es un coche notablemente más grande que su antecesor. Crece 16 cm hasta los 5,14 metros, crece 5 cm hasta los 1,92 metros de ancho y crece 11 cm de altura hasta los 1,55 metros. Este último dato es importante, ya que condiciona de forma importante su diseño. Ya no es una berlina tan estilizada como lo era antes, y el motivo es que tiene que albergar en sus bajos grandes packs de baterías sin comprometer en exceso el espacio interior.






Es un vehículo pensado para mercados globales. Aunque se venderá en Europa y EE.UU. a partir de primavera de 2026, China será con toda seguridad su principal mercado. Para competir con las ofertas locales, el Lexus ES estrena un diseño más futurista y agresivo, dejando de lado su habitual elegancia en busca de un mayor dramatismo. Es una opinión personal, pero su lenguaje de diseño «Clean Tech x Elegance» es menos elegante que el de sus predecesores, no a causa de sus ópticas o su frontal, si no a causa de su extraña moldura aerodinámica lateral.
En la parte trasera, la más anónima del coche, una óptica escueta recorre el coche de lado a lado y la ausencia de logotipo – reemplazado por el nombre de la marca – diluyen la imagen de marca de Lexus. El interior del Lexus ES también es muy diferente al de su predecesor y en verdad, al de otros coches de la marca. Los detalles y el diseño dejan paso a un gran minimalismo estético, con un salpicadero casi rectilíneo. No obstante, me gusta la moldura que rodea al Lexus Digital Cockpit de 12,3 pulgadas.
La consola central está presidida por una pantalla de 14 pulgadas y los mandos de la climatización, aun siendo dedicados, son táctiles y se ocultan en la moldura cuando el coche está apagado. La palanca de cambios es de tipo «maquinilla de afeitar» y el volante ha perdido su logotipo. Lexus enfatiza que se ha trabajado de forma importante la calidad y el aislamiento, algo que podremos certificar cuando probemos el coche. No obstante, es un interior que a mi parecer pierde diferenciación y pierde personalidad.
Y me duele, porque es una marca que siempre ha tenido una visión diferente del lujo, con una esencia japonesa que parece diluirse en este último ES. A nivel técnico, el Lexus ES 2025 se venderá en versión ES 300h full-hybrid, con una mecánica de 201 CV de potencia combinada, con motor de gasolina de 2,5 litros. Esta mecánica es conocida por su fiabilidad y ahora tiene una batería de mayor capacidad para lograr más eficiencia. Será la versión más vendida y estará disponible tanto con tracción delantera como con tracción total.
La novedad son el lanzamiento de dos versiones 100% eléctricas. Los Lexus ES 350e tendrán un motor eléctrico delantero de 224 CV, mientras que los ES 500e se irán a dos motores y 343 CV combinados. No conocemos cifras de autonomía o prestaciones, pero sabemos que los ejes integran el motor eléctrico, la unidad de control de energía y la transmisión. La tracción total Direct4, en la versión 500e, puede transmitir el 100% del par motor del coche, en milisegundos, a cada uno de los dos ejes.
Fotos del Lexus ES 2025





