Desde el 1 de julio de 2021, la luz V-16 de la DGT puede emplearse como alternativa a los triángulos, para señalizar nuestro vehículo cuando quede detenido en carretera, ya sea por una avería, o por un accidente. El nuevo elemento de preseñalización de peligro se ha introducido por ser una solución más segura que, a diferencia de los triángulos, no requiere que nos bajemos de nuestro coche.
Ahora bien, tal y como os venimos adelantando desde hace tiempo, las luces V-16 de la DGT disponibles actualmente en el mercado tienen una fecha de caducidad. Hasta el 1 de enero de 2026 podremos utilizar, indistintamente, los triángulos que conocíamos hasta ahora, o la luz V-16 de la DGT que a día de hoy puede adquirirse por precios comprendidos normalmente entre los 10€ y los 20€. A partir del 1 de enero de 2026, no obstante, será obligatorio utilizar una luz V-16 de la DGT más sofisticada, con comunicador y sistema de posicionamiento.
¿Qué sucederá cada vez que uses la luz V-16 de la DGT que sí será obligatoria?
La luz V-16 de la DGT actual y la que será obligatoria
Como os decíamos, las luces V-16 disponibles actualmente constan de un sistema de iluminación rotatoria, visible en 360º. Se trata de un elemento muy compacto, que podemos guardar en la guantera de nuestro coche y que tiene la gran ventaja de que puede colocarse en el techo sin bajarnos del coche, únicamente bajando la ventanilla del conductor, y colocándolo sobre una superficie metálica, gracias a que su base está imantada. La luz V-16 ha de disponer de alimentación autónoma, con una pila – lo habitual – o una batería recargable. Recomendamos disponer de pilas de repuesto, para asegurarnos de que en una emergencia nuestra luz V-16 sea funcional.
La luz V-16 de la DGT que será obligatoria en 2026, y que aún no está disponible en el mercado, ofrecerá las mismas características anteriores, pero también un comunicador y un sistema de posicionamiento. En otras palabras, necesitará de una conexión móvil autónoma – que no dependa de aparatos externos o teléfonos móviles – y un receptor GPS, que identifique nuestra posición.
¿Qué sucederá cuando active la luz V-16 de la DGT que será obligatoria?
Al activar el botón de encendido, la luz V-16 de la DGT que será obligatoria hará exactamente lo mismo que las disponibles actualmente en el mercado, encenderá una iluminación rotatoria visible en 360º. Pero la gran diferencia con las luces V-16 que podemos adquirir en estos momentos llega con el protocolo de comunicación que se inicia en ese momento.
La luz V-16 identificará nuestra posición exacta gracias a su receptor GPS y se conectará inmediatamente a los servidores en la nube de la DGT 3.0 para comunicar a la DGT que se ha activado y nuestra posición exacta. Recordemos que las luces V-16 son anónimas y que no están identificadas con un coche, o un conductor.
De manera que en el momento exacto de su activación la DGT sabrá que existe una incidencia, y el punto concreto en que se ha producido, que hay un coche averiado, o accidentado, pero no dispondrá de más información al respecto del vehículo, o de su conductor.
El mantenimiento de las comunicaciones
Como ya te estarás imaginando, el sistema de comunicación, que empleará las redes de telefonía móvil, ha de tener necesariamente un coste. Las nuevas luces V-16 de la DGT que dispongan de comunicador y geoposicionamiento deberán garantizar las comunicaciones durante al menos 12 años y el coste de las comunicaciones estará incluido en el precio que paguemos por la luz V-16. Significa, por lo tanto, que no deberemos pagar una tarifa por el servicio de comunicación, y también que, necesariamente, el precio de la luz V-16 de la DGT que será obligatoria en 2026 será más elevado que el de las que actualmente encontramos en el mercado, generalmente entre los 10€ y los 20€.
Tras la primera comunicación de la luz V-16 de la DGT, esta seguirá enviando la información de activación, y la posición exacta en la que fue activada, cada 100 segundos. Cuando se desactive, la luz V-16 de la DGT dejará de enviar nuestra posición.
También es importante destacar que la luz V-16 de la DGT no podrá, en ningún caso, comunicarse, o enviar nuestra posición, ni ninguna información, si esta no ha sido activada.
¿Por qué quiere conocer nuestra posición la DGT?
Llegados a este punto, tal vez te estés preguntando por qué necesita conocer la DGT nuestra posición. Y la respuesta es sencilla: para mejorar la seguridad en carretera.
Al conocer la posición de un vehículo averiado o accidentado, la DGT puede agilizar la actuación de los servicios de emergencia. Los servicios centrales de la DGT pueden obtener más información de la incidencia si existen cámaras de vigilancia en el tramo en el que se ha activado la luz V-16, enviar una patrulla de Tráfico, solicitar la atención de otros servicios de emergencia, como grúas, o incluso ambulancias.
Y, por supuesto, la DGT también puede advertir de la emergencia a otros conductores, utilizando la señalización variable con los paneles luminosos instalados en los pórticos de la carretera, enviando la posición de la incidencia a las bases de datos que utilizan aplicaciones como Waze y también a los coches conectados.
La DGT avisará al resto de conductores de nuestra posición
Al llegar un aviso de activación de la luz V-16 a los servicios en la nube de la DGT 3.0, la DGT iniciará la gestión de la incidencia y comunicará la activación del sistema de preseñalización de peligro, y la posición, a otros conductores. Utilizando una base de datos y una interfaz de programación, una API, aplicaciones como Waze, o Google Maps, recibirán instantáneamente la incidencia y la posición exacta en la que se ha producido. De manera que estas aplicaciones puedan informar a sus usuarios de que en ese punto de la carretera existe un coche accidentado o averiado.
Los coches modernos ya están permanentemente conectados a internet. Gracias a esta capacidad, la DGT también puede comunicar a cualquier coche conectado la posición del coche que está averiado o accidentado al resto de vehículos en circulación en la red de carreteras de España. De hecho, la DGT ha regulado también una señalización específica, el triángulo virtual V-27, que será el que se muestre en la instrumentación, o en la pantalla del sistema de infoentretenimiento del vehículo, para avisar de una situación de peligro a los conductores.
¿Compro ahora la luz V-16 de la DGT o espero a la que será obligatoria?
Desde que se anunció la regulación de la luz V-16 de la DGT hemos tratado de dar respuesta a esta pregunta. Y desde mi punto de vista sí merece la pena comprar la luz V-16 de la DGT en estos momentos, aún sabiendo que el 1 de enero de 2026 quedará obsoleta y necesitaremos llevar en nuestro coche una luz V-16 con comunicador y posicionamiento, que será más cara. Las luces V-16 disponibles actualmente tienen precios entre los 10€ y los 20€. Un precio muy bajo, prácticamente ridículo, si tenemos en cuenta lo que mejora nuestra seguridad poder señalizar nuestro coche accidentado o averiado sin tener que bajarnos a la carretera.
También es interesante saber que algunas luces V-16 disponibles actualmente ofrecen funciones adicionales, como una iluminación blanca, fija, y más tenue, con la que siempre podremos reutilizarla como luz de cortesía para pequeñas reparaciones en la oscuridad, cambiar una rueda, iluminar el motor con el capó abierto o el maletero, o incluso como luz de camping.
La DGT espera que las nuevas luces V-16, equipadas con comunicador y sistema de posicionamiento, las que serán obligatorias en 2026, lleguen al mercado a finales de este año.