A principios del siglo XX se vivía un momento muy dulce en la industria del motor procedentes de una década tan exitosa como fueron los noventa. Se vivía la llegada de los primeros coches híbridos y se avecinaba la posibilidad de crear coches ultra eficientes. Allá por 2000 se creó en Alemania una firma dispuesta precisamente a crear los coches del mañana. Esta es la historia de Loremo.
Un 2+2 que entrabas como en una cabina y consumía 2 l/100, eso era el Loremo LS
Aunque se fundó en 2000, no se daría a conocer hasta unos años más tarde en el Salón del Automóvil de Ginebra de 2006, donde presentó su Loremo LS. Un coche de lo más interesante, pues no tenía puertas convencionales – en su lugar, entrabas en este coupé de silueta fastback saliendo por delante, pues todo el frontal, incluyendo el parabrisas, se abría como si de una cabina de caza de combate se tratase. Medía 3,75 metros de largo, 1,4 de ancho y 1,14 de alto con una configuración de carrocería 2+2.
Su principal reclamo no era ese en realidad, sino el hecho de ser el menos contaminante (así como el que mejores cifras de consumo tendría) jamás mostrado, dado que afirmaban que la versión Loremo LS, con un motor turbodiésel de tres cilindros con un consumo de en torno a 2 l/100 y unas emisiones de 50 g/km de CO2, muy inferiores a todo lo que había en ese momento. Esto era gracias a su peso, siendo un coche pensado para mercados emergentes, como el de la India.
Los dueños de esta marca alemana tenían en mente varias motorizaciones: para empezar, el Loremo LS llevaría motor turbodiésel, mostrándose como prototipo funcional en el Salón de Frankfurt de 2007. Ya por entonces se avecinaba una variante con motor eléctrico para llevar el nivel de emisiones al mínimo posible de este prototipo tan inusual y estética futurística, pero al mismo tiempo simplista.
En concreto, el Loremo LS utilizaba un 2.0 TDI de 28 CV pero que, gracias a sus alegados 550 kilogramos en vacío, alcanzaría los 170 km/h homologando 2 l/100 km, mientras que la versión eléctrica utilizaría un motor síncrono con 54 CV, un peso de 650 kilogramos y una velocidad máxima de 140 km/h, homologando unos supuestos 6-8 kWh/100 km. El LS valdría en torno a 17.000 euros mientras que el EV se situaría en unos 30.000 euros.
Loremo desaparecería en 2010 como lágrimas en la lluvia
Más adelante, en 2009, Loremo afirmaba que había una versión GT que llevaría un motor de gasolina 2.0 turboalimentado de apenas 60 CV (aún así, comparable en potencia a motor 1.2 o 1.4 de la época) con un supuesto consumo de 3 l/100 km. Loremo estaba creando expectativas, pero faltaba un pequeño detalle. ¿Cuándo íbamos a poder ver estos coches tan singulares?
Pese a una promesa de lanzamiento en 2011, la respuesta llegó en 2010: nunca. En agosto de ese año, Loremo, tras evidentes problemas de falta de fondos, anunció que se habían producido “negociaciones prometedoras con un reputado inversor de Asia”, pero eso fue lo último que se escuchó de ellos. De hecho, se ha podido conservar la página web con los datos de 2009. La cuestión es que sí, llegó a existir el Loremo EV eléctrico y he aquí la prueba.