Los sistemas Start/Stop a menudo generan amor y odio, aunque sobre todo lo primero porque, indiscutiblemente, ahorran combustible. El escepticismo al respecto de este sistema surge ante las dudas del desgaste, y los posibles problemas, que puede generar el continuo encendido y apagado del motor diésel o gasolina en conducción urbana.
Un Start/Stop, pero no para coches diésel y gasolina
El funcionamiento de un sistema Start/Stop es relativamente sencillo. Simplificándolo mucho, es en esencia un motor de arranque «reforzado», una batería más capaz y un motor de combustión interna optimizado, tal y como lo definía mi compañero David Clavero en su guía sobre el Start/Stop, todo ello para conseguir que un motor diésel o gasolina se detenga automáticamente al pararnos, y que vuelva a encenderse cuando vayamos a reanudar la marcha.
De nuevo, simplificándolo mucho, un motor eléctrico no necesita más que interrumpir el suministro eléctrico para detenerse, e incluso puede aprovechar la deceleración para funcionar como generador energía. De manera que, ¿cómo podría funcionar un sistema Start/Stop en un motor eléctrico?
Un Start/Stop diferente, pero necesario
Magna, uno de los proveedores más importantes de la industria del automóvil, ha diseñado un sistema Start/Stop diferente, que no es para motores diésel y gasolina, sino para motores eléctricos, y con un diseño compacto que permitiría su aplicación en todo tipo de vehículos, desde el segmento B, hasta SUV y vehículos comerciales ligeros, y desde vehículos eléctricos de baterías, hasta híbridos e híbridos enchufables.
El sistema Magna eDecoupling no se basa tanto en la necesidad de detener, o encender, un motor eléctrico, sino en facilitar su desconexión del eje para reducir las pérdidas por arrastre que, por pequeñas que sean, siempre están presentes. Y con lo crítica que es la optimización de la energía en un eléctrico, para maximizar su autonomía, cualquier mejora siempre será bien recibida.
Según Magna, este sistema puede conseguir una mejora de la autonomía de hasta un 9%.
Magna eDecoupling
Más allá del sistema electromecánico, que desacopla el motor eléctrico del eje cuando no es necesario para la propulsión del vehículo, la gestión electrónica para acoplar y desacoplar el motor según las circunstancias es crucial para que el sistema rinda correcta y efectivamente. Según Magna, el acoplamiento y el desacoplamiento se producen en menos de 100 milisegundos.
Magna ya ha presentado alguno de los motores que podría emplear este sistema, que pronto veremos en muchos vehículos híbridos y eléctricos. Estos días, precisamente, os hablábamos del nuevo motor Magna eDrive, un motor que está dotado con el sistema eDecoupling y que con solo 75 kilogramos entrega 340 CV de potencia.