Mazda lleva más de 25 años poniendo en las calles a uno de los deportivos más interesantes, con una excelente relación precio/producto, con un genial tacto, con un reparto de pesos perfecto, motores atmosféricos… pero no, hoy no vamos a hablar del Mazda MX-5, tampoco del hipotético sucesor del Mazda RX-8, del Mazda RX-9. Hoy ha caído en nuestras manos un interesante deportivo con el sello de la marca japonesa, un espectacular monoplaza… pero tenemos una mala noticia al respecto…
Este diseño recupera el mito del motor rotativo… acompañando además a un chasis monocasco de fibra de carbono:
Este deportivo monoplaza, que bien podría ser la respuesta de Mazda al BAC Mono, es una creación del diseñador Stefano Airoldi que ha sido bautizada como Mazda FRX y como estarás imaginando se escape, desgraciadamente, de los planes comerciales de Mazda. Es, simplemente, una sugerente recreación que nos hace soñar con un “señor juguete” para trackdays y domingos perfectos en nuestra carretera secundaria favorita.
Si su diseño te ha cautivado, si la idea de un monoplaza matriculable de Mazda te está haciendo babear sobre el teclado, sobre la pantalla de tu móvil, sigue leyendo porque aún hay más…
Esta criaturita ha sido diseñada sobre un chasis monocasco de fibra de carbono y cuenta con un motor rotativo de tres rotores que desarrolla una potencia de 360 caballos y queda emplazado a espaldas del habitáculo en un conjunto que es más pequeño que el ya de por si pequeño Mazda MX-5.
Los apéndices aerodinámicos de su zaga, de su frontal, esas taloneras laterales… determinan el diseño de esta creación que tristemente no acompañará al Miata en los concesionarios de Mazda.
Por suerte sí podemos hacernos con un Mazda MX-5 desde 25.000 euros. Vale, no será tan radical, pero será capaz de ponerte una sonrisa en la cara cada día que lo cojas, aunque sea para ir a hacer la compra o trabajar y dudo mucho que con este monoplaza pudiésemos hacer cualquiera actividad cotidiana… más allá de la de asistir al trackday de turno claro.
Vía: Carscoops