¿Recordáis ese artículo en el que exponíamos 6 cosas del coche moderno que no solo no nos gustaban, sino que nos horrorizaban? Pues bien, hoy os traemos un invento que tiene muchas papeletas para ser la séptima. Y es que Mazda ha llevado a cabo la solicitud de patente ante la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos de un proyecto con el quiere contribuir a erradicar los botones físicos, tarea con la que varias firmas, sin saber muy bien por qué, están obcecadas. Así, la casa nipona propone un sistema que, por medio de un proyector, va crear botones a modo de holograma sobre el marco de las puertas. ¿Una buena idea o vamos de mal en peor?
Antes de entrar en materia vamos a aclarar porque nos parece una nefasta decisión eliminar mandos físicos. Y es que, al fin de cuentas, son muchas las marcas las que quieren hacer desaparecer a los vetustos -pero útiles- mandos físicos en pro de sistemas integrados en pantallas poco intuitivas y con una cantidad ingente de menús en los que es fácil perderse. Con todo esto sí, se moderniza el habitáculo con un diseño más minimalista, pero se genera una mayor distracción para el conductor a la hora de demandar funciones.
El anti-botones de Mazda, una revolución que puede ser una distracción
Mazda hace muchas cosas bien, como tener una gama de motores de lo más interesante por aplicar tecnología diésel en sus propulsores gasolina, un diseño esculpido y trabajado y uno de los deportivos que más felicidad te genera por poco dinero, el MX-5. Sin embargo, esta propuesta de invento puede terminar como un apoyo más en esa innecesaria causa de hacer, aparentemente, más simples los interiores pero a su vez más complejos.
El planteamiento es sencillo, puesto que se trata de un proyector insertado en los pilares A que -valga la redundancia- proyecta botones sobre el salpicadero o en las propias puertas. Con estos, se pretende sustituir mandos como el del elevalunas, el de subir y bajar el volumen o el de regular la temperatura de la climatización.
Realmente no son botones, puesto que estos serían hologramas de los mismos. Sin embargo, el sistema está pensado para que, cuando posemos el dedo sobre la proyección, este detecte una interrupción de la misma y la interprete como que queremos llevar a cabo la función del botón. Además, también cuenta con la capacidad de medir la intensidad con la que posamos el dedo, lo que servirá para indicar que queremos que la acción se realice con más rapidez.
Independientemente de que no estén inmersos los botones en una pantalla, es un sistema que puede implicar igualmente distracciones para el conductor. Y es que el no tener un botón físico sobre el que poder atinar sin apartar la mirada de la carretera es motivo suficiente como para que no sea tan resolutivo como aparenta. Sea como fuere, estamos ante una patente que tiene que ser aprobada y registrada que, de hacerlo, no estará disponible en la gama actual de Mazda y tendremos que esperar unos años.