Desde que en 2011 McLaren se convirtiese en un fabricante de superdeportivos de gran volumen, siempre ha habido un elemento que ha caracterizado a todos y cada uno de sus coches. Hablamos de las suspensiones, un elemento clave para definir el comportamiento de cualquier automóvil, pero que puede ser abordado de muchas maneras. McLaren decidió navegar contracorriente en materia de suspensiones desde el mismo 12C, y aunque sus rivales han respondido con soluciones y tecnologías muy avanzadas, en McLaren acaban de confirmar que seguirán apostando por su fórmula… y lo harán por muy buenas razones.
McLaren y Monroe acaban de anunciar la renovación del acuerdo que los vincula desde el origen del MP4 12C. La colaboración entre ambos fabricantes es la que está detrás de este empecinamiento del fabricante inglés de plantear la suspensión de sus coches de una forma diferente a la que emplean sus rivales. El secreto detrás de esta fórmula son ni más ni menos que las suspensiones interconectadas, un concepto de suspensiones que tiene décadas de vida, que en competiciones como Fórmula 1 ha demostrado excelentes resultados, pero que en el mercado curiosamente se ve muy poco por su elevado coste y complejidad.
El beneficio principal de una suspensión interconectada es que permite gestionar cada rueda teniendo en cuenta al resto. Y es que cuando hablamos de interconexión, efectivamente el trabajo de cada columna de suspensión está condicionado por lo que sucede en el resto de las ruedas, haciendo uso para ello de un circuito hidráulico común a alta presión.
Con esta solución se consigue controlar de forma excepcional el cabaceo y el balanceo del vehículo, alcanzando de este modo un nivel de estabilidad sin igual, incluso cuando el vehículo se enfrenta a fuerzas de elevada magnitud como bien demostró el McLaren 675LT superando la prueba de alce a 83 Km/h, aunque quedando aún por detrás del icónico Citroën Xantia Activa II. Tanto es así que en estos esquemas, tal y como se puede comprobar en los McLaren de las series Super y Ultimate, se puede prescindir de estabilizadoras al uso.
Si bien en el mercado ya encontramos excelentes suspensiones activas, adaptativas o incluso eléctricas como la recién desarollada por Multimatic para el Ferrari Purosangue (que también permite prescindir de estabilizadoras), en McLaren han decidido seguir adelante con su filosofía en cuanto a suspensiones. Así, la última evolución de de esta tecnología fabricada por Monroe, denominada como CVSA2/Kinetic, se mantendrá en la marca de cara al futuro. En estos momentos ya se emplea en el 750S, si bien anteriormente ha sido utilizada por otros modelos como los 765LT, P1, Senna, Speedtail, etc.
