¿Se nos están yendo de las manos los récords de vuelta en Nordschleife? Hace apenas unos días anunciábamos que el NIO EP9, un superdeportivo eléctrico chino de 1.360 CV de potencia – había batido el récord de vehículos de calle en Nürburgring, rodando en unos meteóricos 6 minutos y 45 segundos. A McLaren no le sentó demasiado bien la noticia, y acto seguido, mandó al Infierno Verde a la «artillería pesada». McLaren y Lanzante han producido sólamente cinco unidades del P1 LM, cuatro en color naranja, y un prototipo de pruebas en color gris. Es esta última unidad la que ha arrebatado al EP9 el récord de vuelta para vehículos de calle.
La proeza de McLaren es de proporciones épicas, pero debemos tener en cuenta que el P1 LM es prácticamente un coche de carreras en el que se han instalado el mínimo esencial de elementos de seguridad e iluminación para que se pueda conducir legalmente en carretera. En países como Reino Unido son extremadamente laxos con la homologación de coches de escasa tirada, y este McLaren P1 LM es la prueba fehaciente. Los McLaren P1 LM están derivados de los McLaren P1 GTR, y es un proyecto conjunto llevado a cabo por McLaren y Lanzante, una escudería de competición tradicionalmente vinculada a McLaren.
De los McLaren P1 GTR heredan la mecánica híbrida potencia, que suma un total de 1.000 CV gracias al aumento de la cilindrada del motor térmico – hasta los 3.994 cc – y una potenciación de la máquina eléctrica. Este millar de caballos viene acompañado de un par máximo de 1.050 Nm, usando combustible de calle de 99 octanos, una de las diferencias claves con el P1 GTR, que bebe combustible de competición. El McLaren P1 LM es muy ligero: pesa sólamente 1.390 kilos, 110 kilos menos que el McLaren P1 de calle y 60 kilos menos que el McLaren P1 GTR. El ahorro de peso se debe en gran parte a la supresión del sistema hidráulico de levantamiento del coche.
Los McLaren P1 LM también poseen una aerodinámica diferente a los P1 y P1 GTR. Aunque es igualmente activa, el kit de carrocería (de fibra de carbono, por supuesto) ha sido rediseñado para lograr una carga aerodinámica un 40% superior. En definitiva, es una máquina de ensueño, un coche de carreras matriculado, que pilotado por Kenny Brack – ganador de la Indy 500 en 1998 – ha conseguido dar una vuelta al Infierno Verde en sólo 6 minutos y 43,2 segundos. Es un tiempo 2,7 segundos inferior al del NIO EP9, y ha sido obtenido con neumáticos Pirelli Trofeo R, semislicks homologados para uso en carretera.
Tras batir el récord hace apenas unos días, el McLaren P1 XP1LM – es el primer prototipo, el mismo que batió el año pasado el récord en el ascenso a Goodwood – ha vuelto rodando a Reino Unido, soportando atascos, ciudades y carreteras de verdad. Incluso han tenido tiempo de darse un paseo por algunos puertos de montaña. Este récord convierte al McLaren P1 LM en el nuevo rey del Nordschleife, rodando 13 segundos más rápido que el McLaren P1 de calle. Lo que ahora me pregunto es cuanto tardará este récord en ser batido, y qué sera lo próximo. ¿Un Fórmula 1 homologado para circular en carretera?