Mercedes-AMG ha presentado en el concurso de elegancia de Pebble Beach el que será uno de sus vehículos más singulares, el Mercedes-AMG GT3 Edition 130Y Motorsport. Para homenajear los 130 años en competición de la marca, contando la victoria del Daimler que triunfó en la París-Rouen de 1894, aparece esta bestia que es, en esencia, el AMG GT3 de circuitos acomodado para la calle y liberado de las ataduras de la normativa de competición.
Récord entre los GT en Mount Panorama
Aunque se ha presentado en Pebble Beach, esta no es la primera vez que veíamos a este coche en acción, pues su debut ‘en sociedad’ tuvo lugar en febrero de este año en los prolegómenos de las 12 Horas de Bathurst. Allí, el piloto oficial de la marca Jules Gounon batió el récord de la pista para vehículos GT marcando un tiempo de 1:56.605, dos segundos más rápido que la media anterior en Mount Panorama.
Liberado de las restricciones de la normativa GT3, en este AMG se ha cambiado el splitter delantero, las aperturas de aire en los alerones delanteros, los faldones laterales, el suelo y el difusor para mejorar el agarre aerodinámico hasta en un 15%. Además, el alerón trasero se ha modificado con tecnología de F1 para que, con un botón, se abra el DRS y así aumentar la velocidad punta en rectas al reducir la resistencia al aire.
Bajo el capó encontramos el 6.3 V8 que será el último AMG GT3 que lleve motor atmosférico, prescindiendo del turbo pero quitando también la brida de admisión de aire obligatoria para los coches de carrera. Sin la brida, el motor alcanza los 680 CV de potencia y 730 Nm de par motor, acoplado a la caja de competición de seis marchas secuencial de AMG. Incluso con la enorme carga aerodinámica de este coche, el 6.3 V8 de AMG propulsa este coche hasta los 315 kilómetros por hora de velocidad punta.
De nuevo gracias a la liberación de la normativa GT3, los frenos de discos de acero se cambian por frenos de carbono (390 milímetros delante con seis pistones delante y 355 milímetros con cuatro pistones detrás) con balance de frenos ajustable en el volante. Otras bondades que encontramos en esta bestia traída de las carreras son suspensión de doble horquilla en ambos ejes, amortiguadores de competición de cuatro vías, barras antivuelco ajustables y un depósito de combustible de 120 litros.
13 unidades a 1,03 millones de euros cada uno
En el interior encontramos la jaula de seguridad de carbono, cinturones de seguridad de cinco puntos, sistema de extinción de fuegos y asientos forrados con tela en un patrón a cuadros, además de cuero en los reposacabezas y en las puertas. Esta bestia de los circuitos mide 4,795 metros de largo, 2,052 de ancho, 1,295 de alto y pesa tan solo 1,275 kilogramos.
Con respecto al precio, Mercedes-AMG ha establecido la cifra de 1,03 millones de euros antes de incluir impuestos, un precio acorde al de uno de los coches más singulares y de más altas prestaciones vistos hasta el momento, el GT definitivo. Para quien esté dispuesto a pagar esa cifra, va a tener que darse prisa dado que sólo existirán 13 unidades de este coche para todo el mundo. Todas ellas con su propia insignia específica, además de incorporar una funda exclusiva para este AMG tan especial.