Mercedes-Benz tiene un reto enorme por delante. El reto de convencernos de que han enmendado los errores y de que uno de los aspectos que menos nos gustaba de su gama compacta, el de la calidad y los ajustes de acabados interiores, lo han corregido. La prueba de fuego tendrá lugar el año que viene, con la presentación de la nueva generación del Mercedes Clase A. Lo que veamos en su interior será el diseño con el que tendremos que convivir en su gama compacta a lo largo de la próxima década, también en productos tan importantes como el Mercedes GLA. No es baladí. Y para ir abriendo boca, Mercedes-Benz ha querido anticiparnos lo que sucederá mostrándonos las primeras imágenes del interior del Mercedes Clase A que lanzarán el año que viene. Unas fotografías que prometen, que aseguran un paso adelante en cuanto a calidad y diseño y que confirman que el nuevo Clase A heredará los sistemas de pantallas ya utilizados por los hermanos mayores de la marca, como el Mercedes Clase S y el Mercedes Clase E. Ver adelanto en vídeo del Mercedes Clase A.
Mercedes-Benz Mercedes Clase A
Basta un ligero vistazo para comprobar cómo este Mercedes Clase A dará un paso adelante importantísimo en cuanto a diseño interior. Nos sorprende cómo el salpicadero, y el perfil de los paneles de las puertas, se ha diseñado más que nunca bajo la continuidad que sí destaca en los productos más lujosos de la gama y que pretende asemejarse al diseño de un yate.
a sus productos más compactos y asequibles
Pero el detalle que más destaca, sin duda, es el de haber eliminado el sistema de entretenimiento con una pantalla flotante sobre el salpicadero, para transformarlo en una pantalla aún más grande, y doble, que nace de la prolongación de la instrumentación digital, señas de identidad de las gamas Clase S y Clase E.
En el nuevo Mercedes Clase A desaparecerán muchos botones, que serán sustituidos por un menú en el sistema de entretenimiento, accesible desde un control táctil y un giratorio en la consola central. También desaparecerán algunos indicadores, como los de la temperatura del climatizador, que por cierto también estrenará un nuevo diseño más caprichoso de aireadores, en forma de turbina.
En cualquier caso, el del diseño, o el de emplear más pantallas, y de mayor tamaño, no será el único problema que tenga que resolverse en este Mercedes Clase A. Nuestra mayor preocupación sigue estando en que la calidad percibida, y ciertos ajustes, estén a la altura de lo que se espera de él. Y mucho nos tememos que no podremos resolver esa duda hasta el año que viene, cuando se presente y podamos subirnos a bordo y comprobarlo in situ.
Más imágenes del interior del nuevo Mercedes Clase A: