Mercedes-Benz tiene un catálogo de deportivos lo suficientemente nutrido como para medirse con algunas de las máquinas más rápidas que hemos conducido en los últimos años. Pero lo último que uno espera es que sea un Mercedes Clase A el que se enfrente a dos bestias como el Audi R8 y el Nissan GT-R, y no solo eso, que cumpla con honores. Obviamente no es un Mercedes Clase A cualquiera, sino un Mercedes-AMG A45 que, para más inri, ha sido puesto a punto por Brabus, preparador que ofrece kits para llevar al A45 hasta los 400 CV de potencia. Pero mejor pasemos a ver este vídeo y cómo afronta una prueba de aceleración frente al Audi R8 y el Nissan GT-R.
El más potente de los Mercedes Clase A
Recordemos que el Mercedes-AMG A45 es un compacto de cinco puertas, con motor de cuatro cilindros y dos litros de desplazamiento, con tracción a las cuatro ruedas y cambio de doble embrague. En su última iteración, el Mercedes-AMG A45 entrega 381 CV de potencia a 6.000 rpm.
Nissan GT-R
Con la preparación de Brabus ya estaríamos hablando de 400 CV de potencia y 500 Nm de par máximo y un 0 a 100 km/h en 4,2 segundos. Es una cifra espectacular para un producto de estas características. Pero como ya habrás imaginado no sería suficiente para vencer en un sprint de 0 a 100 km/h al Nissan GT-R y el Audi R8. ¿Pero entonces por qué resulta tan interesante este vídeo?
Aunque con suficiente tiempo y distancia el Mercedes-AMG A45 no tiene nada que hacer frente al Audi R8 y el Nissan GT-R, deportivos que teóricamente han de llegar antes a los 100 km/h, y que alcanzan puntas muy superiores, sorprende en los primeros metros, y los primeros instantes, por su capacidad de aceleración.
El Mercedes-AMG A45 tiene mucha potencia que transmitir al asfalto en un momento crucial, en esos primeros metros, pero es capaz de transmitirla con mayor efectividad que sus rivales, mucho más potentes que él, y también con tracción a las cuatro ruedas.
También hay que tener en cuenta que, a juzgar por el vídeo, el Audi R8 y el Nissan GT-R tardan un instante en iniciar la salida lanzada, lo suficiente para otorgar una gran ventaja al Mercedes-Benz. Si algo hemos podido comprobar en estos deportivos, y sobre todo en el Nissan GT-R, es que en el caso de que quisiéramos medirnos con otros deportivos, es importante tener en cuenta que con el launch control hay un pequeño retardo entre el momento en que soltamos el freno, y el coche sale lanzado como una bala. Un retardo que entendemos se debe a los cálculos que ha de realizar la electrónica para maximizar la entrega de potencia sin que se produzcan pérdidas de tracción. Y un retardo que quizás el conductor del GT-R no haya tenido en cuenta a la hora de afrontar esta prueba, en un vídeo que, por otro lado, no es por ello menos interesante.
Más imágenes del Mercedes Clase A45 AMG.