Tras el lanzamiento de la nueva generación del Mercedes Clase E (“Mercedes Clase E 2016, todo lo que tienes que saber de la nueva generación”) ha pasado lo que la lógica nos dictaba que debía pasar: su gama, la Clase E, ha crecido paso a paso para presentarnos a la opción familiar, el Mercedes Clase E Estate (“Mercedes Clase E Estate 2017: todo sobre la alternativa de Mercedes al BMW Serie 5 Touring y al Audi A6 Avant”); a la variante de tres puertas, el Mercedes Clase E Coupé (“Las 4 claves del nuevo Mercedes Clase E Coupé, un vídeo y 55 imágenes: ¿es rival para BMW Serie 4 o Audi A5? ¿o algo más?”) y a una nueva versión de vocación offroad, el Mercedes Clase E All-Terrain. Faltaba, claro, el descapotable, un Mercedes Clase E Cabrio que debuta con motivo del Salón de Ginebra 2017 proponiéndonos toda la tecnología y los trazos estéticos que ya conocíamos en el resto de la familia E de Mercedes ahora con la posibilidad de disfrutarlo con el cielo como techo. Hora de conocer todos los detalles del Mercedes Clase E Cabrio 2017.
Elegante, como no podía ser de otra forma, el Mercedes Clase E Cabrio nos propone una capota clásica de lona, disponible más allá del clásico negro en rojo, marrón o azul, capaz de plegarse o cerrarse (con un accionamiento automático claro) en 20 segundos, permitiéndonos ejecutar esta maniobra en movimiento siempre y cuando no superemos la barrera de los 50 km/h.
Esta capota deriva directamente del hermano mayor del Mercedes Clase E, sí, del Mercedes Clase S Cabrio y claro, viniendo de donde viene, de la punta de lanza del “The Best Or Nothing” (lo mejor o nada, un slogan habitual en la marca), la calidad está asegurada.
Como suele ocurrir en estos cabrios la capota, al plegarse, se oculta en el maletero, limitando así más la ya de por si limitada capacidad de carga de este tipo de coches. El Mercedes Clase E Cabrio cuenta con un maletero de 385 litros que al plegar la capota se convierte en uno de 310 litros.
Si nos fijamos en sus medidas, más allá de la capacidad de carga de este maletero, nos topamos con una longitud de 4.826 mm, una anchura de 1.860 mm, una altura de 1.428 mm y una distancia entre ejes de 2.873, esto se traduce en que el coche ha crecido, notablemente, en todos las cotas respecto a la generación anterior, con 123 mm más de largo, con 74 mm más de ancho, 30 mm más de alto y 113 mm más de batalla mejorando así, también de forma destacable, la habitabilidad interior.
Mercedes no ha detallado la gama de motores del Mercedes Clase E cabrio aunque podemos imaginar que será semejante a la del coupé con un Mercedes Clase E 300 de 245 caballos, un Mercedes Clase E 400 de 333 caballos y un Mercedes Clase E 220 d, diésel, de 194 caballos. Tendremos que esperar para conocer con detalle esta gama… y para ver alguna versión AMG de este Clase E Cabrio.
Por supuesto Mercedes ha fijado una nueva puesta a punto para el chasis de este descapotable, encontrándonos con una suspensión que es 15 mm más baja que la de la berlina. Además está disponible como opción dos suspensiones regulables, una de ellas neumática.
Entre el equipamiento específico de esta versión destacan, además de los “Airscarf” (unos conductos de calefacción situados a la altura del cuello) y el Aircap (un deflector eléctrico), los cueros debidamente preparados para repeler mejor el calor y un sistema de climatización inteligente que ajusta la temperatura del habitáculo en función de si estamos descapotados o no.
Por último cabe mencionar que, claro, no falta la notable dotación tecnológica de la que ya hizo gala la berlina con el control de crucero adaptativo, con la posibilidad de equipar esas dos enormes pantallas de 12.3 pulgadas (una para la instrumentación y otra para el sistema multimedia), el volante con superficies táctiles, el sistema de mantenimiento en el carril… aspectos que ya te hemos detallado en numerosas ocasiones en los “a fondo” del resto de variantes del Mercedes Clase E.
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