El familiar incomprendido que siempre olvidas es premium, con etiqueta y mucho más barato de lo que crees

La primera década del presente siglo fue una década de experimentación por parte de muchos fabricantes de coches. Los SUV no eran la norma, pero algunas marcas coqueteaban con la fusión entre compactos, monovolúmenes o todoterrenos, dando lugar a coches tan diferentes e interesantes como los Honda FR-V o Skoda Roomster. Mercedes fue un paso más allá. Con el coche que protagoniza este artículo creó un vehículo que no era SUV, berlina, furgoneta o monovolumen. Quizá el perfecto crossover, y a día de hoy, una gema premium absolutamente infravalorada.

Mercedes Clase R, un infravalorado híbrido de SUV, berlina y monovolumen

Ese coche es el Mercedes Clase R, fabricado para los mercados occidentales entre los años 2005 y 2013. La Clase R de Mercedes fue lanzada al mercado tras el éxito de los Mercedes Clase A y Clase B, cuya fórmula se trató de llevar a un producto mucho más grande y lujoso. Fue ideada con mercados como Estados Unidos en mente, pero también se vendió durante sus 8 años de vida comercial en el mercado europeo. Los Clase R, destinado a satisfacer la demanda de monovolúmenes del mercado americano, fueron fabricados para todo el mundo en Alabama (EE.UU.).

Era más monovolumen que familiar o SUV, pero carecía de acceso mediante puertas correderas

Fotos del Mercedes Clase R

No fueron coches comercialmente exitosos: su marketing era confuso, jugaban en muchos segmentos al mismo tiempo, y tanto la recesión global de 2008 como el auge de los SUV jugaron en su contra. Con todo, eran coches de calidad, amplios y muy cómodos, si bien es cierto que nunca fueron especialmente agraciados a nivel estético. Los Mercedes Clase R compartían plataforma con los Mercedes ML y Mercedes GL de la época, y eran coches de tamaño muy considerable: 4,92 metros en su versión de batalla corta y 5,16 metros en las versiones de batalla larga.

Una de las grandes ventajas de estos coches era un interior de alta calidad – al nivel de la calidad interior de un Mercedes Clase E de la época – que podía contar con mucho equipamiento y soluciones dignas de un fabricante premium como Mercedes. Me refiero a asientos ventilados/calefactados, climatizador trizona, pantallas con reproductor DVD en las plazas traseras, pantallas de primera categoría para los sistemas de infoentretenimiento, navegador GPS y lujosos guarnecidos de cuero o madera natural.

En 2010, los Clase R recibieron un lavado de cara. El coche recibió un nuevo frontal y nuevas mecánicas

Su habitáculo tenía cinco plazas, pero podía tener una tercera fila opcional. Los Clase R de tres filas se vendían en dos configuraciones posibles: una configuración 2+3+2 de siete plazas o 2+2+2 de seis plazas. Esta última era la más lujosa, con dos enormes butacas para los pasajeros de la segunda fila, regulables longitudinalmente. A pesar de ser un coche de grandes dimensiones, la tercera fila de asientos no era apta para adultos por espacio y acceso, teniendo un carácter más bien auxiliar – al contrario de un monovolumen con todas las de la ley.

Los Mercedes Clase R sí tenían un buen maletero, con 530 litros de volumen en las versiones cortas, y 615 litros en las versiones largas – con la tercera fila plegada. Todos los Mercedes Clase R eran coches orientados a un gran confort de marcha, con un gran aislamiento acústico y suspensión cómoda. Podía contar con suspensión neumática Airmatic, cuyo buen estado es vital si queremos evitar costosas averías o reparaciones. Si quieres evitar problemas, busca una unidad con suspensión convencional.

Los Clase R nunca fueron todoterrenos, pero con la suspensión neumática tenía casi 20 cm de altura libre al suelo y podía equipar tracción total permanente 4MATIC, sin reductora ni bloqueos de diferenciales – y cotas offroad inferiores a las de un SUV, dicho sea de paso.

¿Cuáles son los motores del Clase R? ¿En qué debo fijarme?

Los Mercedes Clase R estuvieron disponibles con mecánicas diésel y gasolina de seis y ocho cilindros. Todas ellas se asociaban a cajas de cambio automáticas 7G-Tronic de siete relaciones. La gama diésel constaba de diferentes versiones del mismo OM642, un turbodiésel common-rail de 3,0 litros y seis cilindros en uve. Desarrollaban potencias de entre 190 CV en los R 280 CDI de acceso, y los 265 CV de los R 350 CDI post-lavado de cara. Todos los motores diésel de los Mercedes Clase R vendidos en España (y Europa) tienen etiqueta B de la DGT.

Los motores de los Mercedes Clase R son duraderos, robustos y fiables

Los OM642 son mecánicas duraderas y fiables, con cadena de distribución. Es necesario prestar atención a su buen sonido. Un traqueteo excesivo o sonidos anómalos en frío indican la necesidad de sustituir la cadena de distribución. Es importante usar aceite de calidad en los intervalos de sustitución recomendados y comprobar que los inyectores estén en buen estado. Una limpieza del sistema de ventilación del cárter es recomendable en estos motores cada, como máximo, 150.000 km. Bien cuidado, el motor puede alcanzar el medio millón de kilómetros.

En gasolina, la gama se componía de motores V6 de 3,0 y 3,5 litros de cubicaje, con potencias de entre 231 CV y 272 CV. El tope de gama era un V8, disponible en versiones de 306 CV y 5,0 litros – hasta 2007 – y 388 CV y 5,5 litros, de 2007 en adelante.
El verdadero tope de gama era el exótico y rarísimo Mercedes R 63 AMG, una versión deportiva equipada con un tren de rodaje específico y un V8 atmosférico de 6,2 litros y 510 CV de potencia. De esta última versión se produjeron menos de 200 unidades y su oferta en el mercado de segunda mano es casi nula.
Los motores de gasolina de la Clase R son en general muy fiables y duraderos. Algunos V6 podrían experimentar un funcionamiento irregular por el desgaste prematuro de uno de los engranajes de la distribución.
Los V8 de 5,0 litros son prácticamente indestructibles, si bien tienen un gran apetito por el combustible y no es extraño que desarrollen algunas pérdidas de aceite por el retén del cigüeñal. Los V8 de 5,5 litros comparten muchos componentes con los V6, y pueden sufrir en algunos casos de los mismos problemas, pero son, por lo general, muy sólidos. Eso sí, es conveniente asegurarse del buen funcionamiento del termostato y de las palomillas de la admisión variable.

Es importante que el cambio 7G-Tronic funcione de forma suave y fiable. El fallo más típico es una placa conductora, electrónica, averiada

¿Cuánto debo pagar por un Mercedes Clase R usado?

El precio de un Mercedes Clase R de segunda mano depende de muchos factores, siendo la edad y el kilometraje los más importantes en su cotización en el mercado usado.
Puedes encontrar unidades desde 3.000 euros, pero estarán en un estadio mediocre – o directamente malo – y/o tendrán muchos kilómetros. En general, son coches que han cubierto distancias grandes, por tanto, los coches con menos kilómetros tienen cierto sobreprecio.
En el mercado español, la mayor parte de unidades llevan motor diésel, y la mayor parte corresponden a antes de su lavado de cara.
Las unidades que maximizan la relación calidad-precio están en el entorno de los 9.000-10.000 euros. Es importante que el vendedor pueda acreditar su buen estado y correcto mantenimiento, con un historial limpio.
Es complicado encontrar unidades con menos de 200.000 km, y suelen ser, lógicamente, las más caras con diferencia.
En cualquier caso, aun siendo un coche interesante, sólido y de calidad, es un coche con cierta complejidad mecánica. Recomendamos una revisión a fondo antes de ejecutar una compra, y elegir una unidad bien mantenida. Los chollos salen caros.