Mercedes-Benz sigue enfrascada en su proceso de renovación de toda la gama de acceso a su oferta. Si hace unas semanas conocíamos la actualización de sus turismos como los Mercedes Clase A y Clase B, ahora le ha tocado el turno al pequeño de la gama SUV, el Mercedes GLA, y al modelo de Mercedes que, con 7 plazas, ofrece un tamaño más reducido. Hablamos del Mercedes GLB, que recibe el mismo tratamiento que sus hermanos para mejorar su aspecto y sus capacidades tecnológicas, sin dejar de lado la eficiencia de sus renovados motores. ¿Sigue mereciendo la pena este Mercedes GLB 2023?
Presentado en 2020, lo cierto es que éramos muchos los que inicialmente dudábamos del planteamiento de este modelo, un Mercedes GLB que pretendía, en poco más de 4.60 metros de largo, ofrecer una carrocería polivalente, con capacidad para 7 pasajeros, pero con unas dimensiones exteriores que no distaban mucho de un modelo compacto, todo ello con una estética de estilo mucho más cuadrado que el que se estilaba en la marca.
Mercedes-Benz Mercedes GLB
Sin embargo, el tiempo una vez más quita o da razones, y en el caso del GLB ha impuesto su ley dando al pequeño Mercedes el lugar que le corresponde, con unas cifras de ventas muy respetables que sin duda refuerzan la posición de la firma de la estrella en un segmento en el que al menos en la actualidad se mueve casi sin ningún rival directo. El Mercedes GLB 2023 mejora su atractivo estético y amplía sus posibilidades técnicas, amén de disfrutar de nuevas motorizaciones electrificadas.
El nuevo Mercedes GLB sigue siendo un 7 plazas especial
A nivel estético, las mayores diferencias se encuentran en la parte delantera. Los faros delanteros tienen un nuevo diseño interno, manteniendo la tecnología LED matricial con la que ya contaba el GLB en la actualidad. La parrilla también presenta un nuevo diseño interno y el parachoques inferior cuenta con molduras decorativas de diferente factura. Además, las llantas de aleación tienen diseños nuevos y en la parte trasera se pueden apreciar luces con un diseño interno diferente, pero siempre con tecnología LED.
En cuanto al interior, los cambios son menores, pero perceptibles. El volante ha sido rediseñado para parecerse a los que utilizan los hermanos mayores de la marca, con dos brazos dobles en los que se instalan superficies táctiles. El sistema multimedia MBUX se ha vuelto más potente y ha eliminado el touchpad de la consola central, dejando un espacio portaobjetos de pequeño tamaño en el que depositar tarjetas o pequeños objetos. La aplicación «Mercedes me» ofrece servicios en línea que mejoran la capacidad de diálogo y aprendizaje del asistente de voz y, además, ahora es posible jugar a varios videojuegos utilizando los mandos del volante y las pantallas (ejem ejem, Tesla…)
Mercedes ha mejorado su paquete de asistentes como ya ha hecho en el resto de modelos de acceso a su gama. Por ejemplo, el sistema de mantenimiento de carril actúa ahora de manera más suave y lo hace sobre la dirección, no sobre los frenos, mientras que el asistente de aparcamiento ahora puede realizar maniobras en aparcamientos en línea.
En cuanto a los motores, el GLB de Mercedes ha recibido la misma actualización que acaba de recibir el Mercedes GLA. La gama de motores de gasolina se ha actualizado con un sistema de electrificación ligera de 48V en todos los modelos, lo que les permite obtener la etiqueta ECO de la DGT, pero los motores diésel no han sufrido cambios y se tienen que conformar con la etiqueta C.