Mercedes ha anunciado el lanzamiento de un nuevo propulsor de gasolina. Un motor de cuatro cilindros denominado M 264 que ofrece las prestaciones y potencia de un seis cilindros, con sólo dos litros de cubicaje. Este motor se estrenará en los Mercedes Clase E Coupé y Cabriolet, y poco a poco irá extendiéndose a otros modelos de la gama. Es un producto vinculado al nuevo seis cilindros en línea, el M 256 del que ya os hablamos hace un tiempo. Su principal peculiaridad es que posee un sistema eléctrico de 48 voltios, con un motor de arranque y alternador que le confieren capacidades semi-híbridas.
Mercedes está orgullosa de su nuevo propulsor turboalimentado. Es un cuatro cilindros con una potencia de 299 CV, disponibles entre las 5.800 rpm y las 6.100 rpm, acompañados de un par máximo de unos contundentes 400 Nm, constantes entre las 3.000 rpm y las 4.000 rpm. Con una cilindrada de 1.991 cc, posee una potencia específica de 150 CV/litro, cifras que hasta ahora sólo supera el bloque AMG del Mercedes-AMG A 45, un producto de alto rendimiento. Este motor no busca las prestaciones rabiosas del AMG, es un propulsor de diario, un motor que moverá berlinas, todocaminos y vehículos mucho más sensatos.
Su turbocompresor es de tipo twin-scroll, con un colector donde recibe de forma independiente los flujos de escape de cada pareja de cilindros. Gracias a ello, se produce menos retardo en su puesta en marcha – el temido turbo lag – y se genera más par motor a bajas vueltas. No obstante, la principal ventaja, o la característica definitoria de este M 264 es un sistema eléctrico de 48 voltios. Este sistema es denominado EQ Inside por Mercedes, y consta de varios elementos clave: un alternador-motor de arranque conectado a la correa de accesorios del motor y una bomba de agua eléctrica.
Gracias a que ofrece cuatro veces la potencia de un sistema de 12 voltios – la norma en el mundo del automóvil – el M 264 presume de funciones híbridas. Es capaz de recuperar hasta 12 kW (16,3 CV) de energía en las frenadas, y es capaz de apoyar el motor térmico con hasta 10 kW (13,6 CV) y 150 Nm de par, siempre que rodemos a menos de 2.500 rpm. Al igual que ocurre en otros híbridos, este alternador-motor de arranque permite que el propulsor se ponga en funcionamiento de forma rápida y casi imperceptible. Por último, posibilita un sistema Start&Stop en el que podemos estar rodando con el motor completamente desconectado.
Nota: la foto corresponde al 2.0 turbodiésel de un Mercedes Clase E All Terrain.
Es una tecnología con la que grupos como Volkswagen han estado coqueteando, introduciéndola en productos insignia como el Audi A8. Los M 264 se estrenan en los Mercedes Clase E Coupé y Cabriolet, y lo hacen bajo la denominación E 350, asociados a una caja de cambios 9G-Tronic de convertidor de par y nueve relaciones, un desarrollo estrenado en la nueva generación de los Mercedes Clase E. Sobre el papel, arrojan consumos medios de 6,7 y 6,8 l/100 km respectivamente, con una aceleración respectiva de 5,9 y 6,1 segundos en el 0 a 100 km/h. En ambos vehículos la velocidad punta queda limitada por electrónica a 250 km/h.