Aunque es Volkswagen la palabra que, en realidad, significa “coche del pueblo”, esta definición se atribuye a uno de sus modelos: el Volkswagen Tipo 1, conocido también como Volkswagen Beetle. Ferdinand Porsche creó, en los años 30, un coche fiable, amplio y asequible por encargo de las autoridades nazis: características por las que se apropió de la citada descripción. Ahora la interpretación moderna de aquel vehículo se inspira en Porsche y cuesta más de 500.000 euros.
Volkswagen dejó de fabricar el Volkswagen Beetle en 2003: ya entonces se había convertido en uno de los coches más populares del mundo y en uno de los iconos de la marca. Con este punto de partida, la marca alemana Milivié GmbH (nacida en 2021 de la mano del ingeniero Jonathan Engler) ha presentado un restomod de producción limitada que toma el modelo original y lo adapta a los tiempos actuales. Así es el Milivié 1.
Volkswagen Beetle
Han usado, no en vano, un Volkswagen 1303 como vehículo donante para dar forma al Milivié 1, que mantiene el chasis original del Volkswagen Beetle restaurado y mejorado con un sistema de suspensión nuevo, amortiguadores de estreno y frenos con pinzas más grandes (de seis pistones en los delanteros y de cuatro en los traseros). Las ruedas calzan unas llantas de 19 pulgadas que, según la marca, tienen su propio estilo… aunque recuerdan poderosamente a las de Alfa Romeo.
Porsche, fuente de inspiración
El diseño exterior es muy parecido al de un Volkswagen Beetle clásico, con algunos toques que nos recuerdan a otra marca del grupo: Porsche. Y es que parecen haberse inspirado en el Porsche 718 RSK para diseñar la parrilla, en el Porsche 356 para el splitter delantero o en el Porsche 911 Carrera RS de 1973 para crear ese alerón trasero con la característica forma de cola de pato.
A pesar de esta herencia, el Milivié 1 tiene sus propios rasgos con los que optimizado su aerodinámica: el parabrisas se ha adelantado y el capó no sólo es más plano, también ha crecido ocho centímetros. Por otro lado, han eliminado elementos del modelo original y los han sustituido por diseños propios como ha ocurrido con las manetas de las puertas, los retrovisores, los marcos de las ventanillas, la tapa del depósito del combustible y determinados detalles decorativos cromados.
En el renovado interior, el Milivié 1 presume de un elevado nivel tecnológico con las últimas amenidades disponibles así como un par de pantallas de 12,3 pulgadas unidas en una sola para albergar el cuadro de instrumentos y el sistema de infoentretenimiento. Los asientos calefactables son tipo báquet y están hechos en fibra de carbono. El toque retro corre a cargo del volante de tres radios.
Un motor (casi) a medida
Bajo esa carrocería que no esconde el vehículo en el que se inspira, el Milivié 1, a diferencia de muchos de los restomod que hemos visto hasta ahora, no tiene una mecánica eléctrica. Está impulsado por un motor de gasolina de cuatro cilindros y 2.28 litros, que está refrigerado por aire, alimentado por dos carburadores Weber y cuenta encendido electrónico.
No hay cifras de potencia porque cada unidad se ajustará para ofrecer el rendimiento óptimo en función de las necesidades de su propietario y de la normativa ambiental de su lugar de residencia. Eso sí, Milivié lo ha dotado con su propio software para crear tres modos de conducción: Drive, Sports y Manual. En este último es posible cambiar de marcha con unas levas hechas de fibra de carbono y adaptadas a la forma de la mano del conductor. La transmisión se hace a través de una caja de cambios automática ZF de cuatro relaciones.
¿Por qué 22 unidades?
Milivié sólo fabricará 22 unidades del Milivié 1, una cifra que no ha sido escogida al azar: rinde homenaje a los 21,5 millones de Volkswagen Beetle (redondeando, eso sí) que se vendieron desde que fue presentado en 1938 hasta que se fabricó el último en 2019. Su precio inicial es de 570.000 euros y la empresa alemana tiene previsto comenzar las primeras entregas en julio de 2023 alargando su producción hasta mayo de 2025.