MINI continúa renovando su gama de vehículos y ahora, meses después de que apareciera el nuevo MINI Cooper de tres puertas, llega la variante de 5 puertas, con las diferencias externas evidentes y manteniendo el mismo lenguaje de diseño que caracteriza a los modelos de la icónica marca. Lo más interesante de todo es que, pese a que MINI aseguró que realizaría la transición a eléctrico, el MINI de cinco puertas sólo se vende con dos variantes de motor de gasolina, un giro de los acontecimientos de lo más interesante – sobre todo para los puristas.
MINI Cooper 5 puertas, igual de largo y ancho, pero con más espacio para las cabezas que su antecesor
En el exterior encontramos un MINI que trata de resistirse a la tendencia del crecimiento: 4,036 metros de largo, 1,744 metros de ancho y una altura de 1,464 metros. Es decir, el mismo largo y ancho que la generación saliente, si bien es 39 milímetros más alto de manera que gana en espacio interior para las cabezas de los ocupantes. En comparación con el 3 puertas, el 5 puertas aumenta el largo de su carrocería en 172 milímetros y el de su batalla en 72 milímetros para hacer hueco para las dos puertas extra con las que gana de manera notable en practicidad.
El espacio en el maletero nunca ha sido el fuerte de un MINI Cooper, con 275 maleteros que se incrementan hasta los 925 litros. En total, cuenta con siete modos de experiencia diferentes, además de un modo personalizado para adaptarse a los gustos del consumidor. De hecho, el MINI Cooper cuenta hasta con un modo de experiencia Go-kart en el cual el display toma los colores gris y rojo de los John Cooper Works.
La oferta de motores es bien sencilla: por un lado está la versión MINI Cooper C, con un motor tricilíndrico gasolina de 156 CV. El punto fuerte en dinámica del MINI es, por supuesto, su tremenda maniobrabilidad, tratando de asemejarse a un kart en cuanto a agilidad y capacidad para cambiar de dirección de manera que puede ser un coche tremendamente efectivo a la par que divertido a la hora de afrontar curvas. Con el motor de tres cilindros es capaz de pasar de 0 a 100 en 8 segundos y alcanzar una velocidad punta de 225 kilómetros por hora.
Por otro lado, el MINI Cooper S cuenta con un cuatro cilindros más frugal que entrega unos respetables 204 CV y 300 Nm de par motor. Su 0 a 100 es de 6,8 segundos y es capaz de alcanzar los 242 kilómetros por hora. El consumo del cuatro cilindros es de 6,8-6,3 l/100 según ciclo WLTP (6,6-6 l/100 km en el caso del tres cilindros).
La suspensión se ha revisado para conseguir el equilibrio entre dinamismo al volante y confort diario
Por dentro encontramos, en el interior, el nuevo color Vibrant Silver disponible incluso en el nivel de acabado Essential, el más básico. Por encima encontramos el Classic, donde se destaca el volante de tres radios inspirado en los MINI clásicos mientras que el tope de gama es el acabado JCW con tela y cuero de imitación con pespuntes rojos y una gama de colores JCW en el salpicadero así como en las puertas.
La suspensión trata de equilibrar estas sensaciones deportivas (ayudado por unas barras antivuelco con mucha precarga para que sea más dinámico al mismo tiempo que controla balanceos de carrocería) con un confort para su uso diario, buscando una dirección precisa y unos frenos potentes. De entrada el MINI Cooper 5 puertas se ofrece con llantas de 16 pulgadas, teniendo como elemento opcional llantas de 17 y 18 pulgadas.