El Real Automóvil Club de España (RACE) y BP han llevado a cabo un estudio sobre las paradas de emergencia y los dispositivos de señalización que se emplean en las mismas. La principal conclusión desvela que, prácticamente, la mitad de los conductores españoles no saben cómo deben actuar cuando se ven obligados a parar en la carretera: por razones como esta ha llegado la luz V-16.
El informe ha encuestado a más de 1.200 conductores. De ellos, tres de cada cuatro se han detenido, en alguna ocasión, en la vía como consecuencia de una avería o accidente. Un escenario en el que hay que extremar las precauciones y en el que no todos saben cómo deben actuar: el 47% no sabía cómo poner los triángulos de emergencia correctamente y el 22% ni siquiera los colocó para advertir al resto.
A esto hay que añadir que el 23,5% de los usuarios de la vía cree que lo más adecuado pasa por quedarse dentro del vehículo, aunque sea posible abandonarlo para permanecer en un sitio seguro. Y por si esto fuera poco, el 20% no sabe que tanto el conductor como el resto de los ocupantes del coche deben llevar el chaleco obligatoriamente cuando salgan del vehículo.
39 fallecidos
Según los datos existentes, en nuestro país se llevan a cabo cuatro millones de asistencias en carretera… al año. O lo que es lo mismo: 11.000 al día. Son acciones que implican riesgo tanto para el conductor como para los servicios de emergencia. No en vano, la Dirección General de Tráfico desveló que, durante el período de 2013 a 2019, se produjeron 248 accidentes a raíz de una avería o accidente.
Las consecuencias de los mismos se traducen en 39 vidas perdidas: 26 estaban arreglando el coche y 13 prestando auxilio. A estas cifras hay que sumar 52 heridos graves y 125 heridos leves. Razones de peso para cambiar la normativa: este ha sido uno de los principales argumentos que han provocado e incentivado la llegada de la luz V-16, una baliza luminosa que cumple la misma función que los triángulos y, sin embargo, es mucho más segura porque su instalación no implica salir del coche.
Cómo colocar los triángulos
De momento, este dispositivo convivirá con los triángulos de emergencia: cuando suframos una avería o tengamos un accidente podremos utilizar cualquiera de los dos sistemas de aviso. En el caso de los últimos tendremos que colocarlos delante y detrás del coche a una distancia mínima de 50 metros para que sean visibles a 100 metros. En vías con un único sentido sólo es necesario colocar el triángulo trasero.
Si los colocamos incorrectamente la multa será de 80 euros y si no disponemos de este elemento, la cifra subirá hasta los 200 euros.
El chaleco reflectante
Las nuevas normas indican que el conductor y sus acompañantes deberán abandonar el vehículo siempre que exista un lugar seguro fuera de la vía de circulación. Si no es posible, lo más adecuado pasa por quedarse dentro con el cinturón de seguridad abrochado mientras llegan los servicios de emergencia.
Tanto para salir del coche para dirigirse a un lugar seguro como para colocar los triángulos, hay una prenda que tendremos que llevar puesta obligatoriamente: el chaleco reflectante, que nos hace visibles para el resto de usuarios de la calzada. Por esta razón tenemos que llevarlo en el habitáculo y no en el maletero. Ignorar este precepto está penado con una multa de 200 euros.
La luz V-16 y los triángulos
El 1 de julio de 2021 entró en vigor la normativa que permite usar tanto la V-16 como los triángulos de emergencia. Convivirán hasta 2026: en ese momento el único dispositivo permitido será la baliza luminosa que, eso sí, tendrá que estar conectada a la plataforma DGT 3.0 para que, de esta manera, todos los conductores y servicios de emergencia estén informados en tiempo real de los incidentes que tienen lugar en las carreteras españolas.