El futuro de Mitsubishi en Europa parecía pender de un hilo hace apenas unos meses, cuando se especulaba con la desaparición del mítico fabricante nipón de las carreteras del viejo continente debido a una gama demasiado anticuada para los estándares europeos y unas cifras de ventas que no hacían más que descender. Sin embargo, desde Mitsubishi -también desde Renault-Nissan, grupo al que pertenece la marca japonesa, han decidido volver a apostar con fuerza por el mercado europeo utilizando, eso sí, componentes de Renault. Para muestra de ello, la nueva generación del Mitsubishi ASX, que a partir de ahora se convierte en un pariente cercano del Renault Captur.
El Mitsubishi ASX es un auténtico baluarte para el fabricante en Europa: desde su presentación hace ya 12 años, el ASX consiguió convertirse en uno de los SUV urbanos más vendidos durante años. Sin embargo, el paso del tiempo ha hecho mella en su imagen pese a los sucesivos rediseños que ha sufrido a lo largo de su vida comercial, ya que en otros aspectos, fundamentalmente en el tecnológico, el ASX no ha podido competir contra los rivales más modernos.
Mitsubishi ASX
Ahora el Mitsubishi ASX se transforma por completo, y lo hace abandonando cualquier rastro del ASX que hemos conocido hasta ahora para pasarse al lado de Renault: y es que este ASX bebe directamente (es algo que tampoco quieren esconder desde Mitsubishi) de la tecnología, el diseño e incluso el ensamblaje de Renault. Esto último tiene especial relevancia para España, ya que el nuevo Mitsubishi ASX, del que conoceremos más datos a finales de 2022, se construirá en la planta de Renault situada en Valladolid, donde ya se ensambla el Renault Captur en exclusiva.
El Mitsubishi ASX es más Renault que Mitsubishi
Me gustaría poderme extender hablando del diseño del nuevo Mitsubishi ASX, un modelo que tendrá que competir con auténticos «cocos» del segmento como el Peugeot 2008, el Hyundai Kona o el Opel Mokka, pero la realidad es que desde Mitsubishi han optado por escoger la solución más sencilla, barata y rápida para desarrollar un nuevo modelo: remarcar un modelo ya existente. Es así como nace la nueva generación del ASX, que es, en esencia, un Renault Captur con los logos de Mitsubishi instalados en su carrocería.
De esta manera, el ASX evoluciona ahora hacia una carrocería más compacta que anteriormente: mide 4,23 m de longitud, 1,57 m de altura y 1,80 m de anchura frente a los 4,30 metros de largo que medía anteriormente. El diseño es, simple y llanamente, el de un Renault Captur: no hay ninguna modificación en cuanto a piezas, paneles o estructuras de la carrocería ni de ninguno de los elementos auxiliares del vehículo tales como las llantas, los paragolpes o los grupos ópticos.
Las modificaciones se limitan a una nueva parrilla frontal con el logo de la marca japonesa, a logos específicos de Mitsubishi en los laterales para las versiones híbridas enchufables y en logos únicos para el portón del maletero, que mantiene la cámara de visión trasera del Captur pero se deshace del logo del rombo.
En el interior, por su parte, encontramos exactamente el mismo habitáculo que encontramos en cualquier Renault Captur, con la única excepción del logo del volante, que cambia lógicamente para adaptarse a la nueva marca. Por lo demás, estamos ante un interior bien ensamblado, con un diseño agradable a la vista y con una carga tecnológica suficiente y competente. A nivel de espacio, recordemos, el Renault Captur y por ende el Mitsubishi ASX ofrecen una habitabilidad suficiente para cuatro adultos, con un maletero que puede alcanzar los 407 litros en las versiones más capaces.
Cuatro mecánicas para el Mitsubishi ASX
La nueva generación del Mitsubishi ASX contará con cuatro mecánicas, todas ellas con un motor de gasolina y, en tres de ellas, con un motor eléctrico. Y es que el ASX contará con un bloque 1.0 turbo como opción de acceso, una versión que ofrece 90 CV y que se puede asociar a una caja de cambios manual de 6 velocidades. Por encima se ofrece un bloque 1.33 turbo de cuatro cilindros con 140 CV y cambio manual o 160 CV y cambio automático de doble embrague y 7 velocidades. En ambos casos es un sistema de propulsión microhíbrido que recibe la etiqueta ECO de la DGT.
Por encima encontramos dos versiones híbridas completas, una no enchufable con 145 CV (etiqueta ECO) y otra enchufable con 160 CV (etiqueta CERO) y una autonomía eléctrica de al menos 40 kilómetros. En ambos casos la transmisión es automática de 6 velocidades. A diferencia del anterior Mitsubishi ASX, esta nueva generación sólo estará disponible con tracción a las ruedas delanteras, sin ninguna posibilidad -ni pretensión- de circular fuera del asfalto.
